Lauren McDowell tiene 13 años y fue enviada de regreso a casa en la escuela, luego de que llegara con su cabeza rapada a un costado y con un particular diseño, al estilo “animal print”.
La madre de Lauren, Yvonne, asegura que el establecimiento ha violado los derechos humanos de la menor al no permitirle expresarse como ella desea. El leopardo que se hizo la joven a un lado de su cabeza, también habría estado teñido de rubio y marrón, según consigna el medio británico Metro.
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Fueron los maestros de la escuela Valley Forge, ubicada en la localidad de Sheffield, Yorkshire del Sur, Inglaterra, los que dieron cuenta del “revelador” corte de Lauren.
“Ella ya tenía el pelo cortado alrededor de una semana antes de volver a la escuela. Nadie tiene el derecho de decirle a otro qué hacer con su cuerpo. Es su cuerpo<“, señaló Yvonne, agregando que su hija no tiene porqué ceder sus derechos cuando ingresa a la escuela.
Pese a que el colegio asegura que potencia la individualidad de sus alumnos, en este caso insisten en que no apoyaran a Lauren, situación que la tiene muy triste, puesto que la adolescente ya habría sufrido problemas de bullying en la escuela.
“Ella fue intimidada en el colegio y le ha llevado un tiempo reconstruir su confianza. Ahora está devastada“, confesó la madre.
Cabe señalar que Lauren es una muy buena alumna, por lo que no entiende qué tiene que ver su pelo con su desempeño como estudiante. “Le he explicado a la escuela que entiendo su política de usar uniforme, y estoy totalmente de acuerdo con ello, pero no puedes decirle a nadie cómo debe ser su estilo de cabello“, agregó.
En la otra parte, el establecimiento asegura que dentro del código de vestimenta impuesto por la institución, se incluye el cabello, donde se consigna que los cortes de pelo extremos y los tintes están prohibidos.
“Ellos la están discriminando debido a su apariencia. Ella tiene derecho a expresarse en la forma que ella quiera, siempre y cuando luzca su uniforme escolar. Le están negando la educación a una niña con ganas de aprender“, remató Yvonne.