Conoce a Riley Benado: una bella estudiante y capitana de las porristas de la localidad Paso Robles (California, Estados Unidos). Como muchas otras jóvenes de 18 años, era muy cercana a su familia y pasaba su tiempo libre tomando fotos y escuchando a su cantante favorita, Taylor Swift. Hasta que un día comenzó a sentirse extraña…
Era 14 de septiembre cuando decidió ir al ginecólogo por un chequeo, porque estaba extremadamente hinchada y adolorida en el sector d ella pelvis. “Lucía como si tuviera 5 meses de embarazo”, detalló ella misma en su página de GoFundMe, que busca reunir fondos para apoyar su tratamiento. El médico le practicó un examen de embarazo “el cual obviamente salió negativo porque sigo siendo virgen”, agregó.
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Intentaron practicarle un ultrasonido, pero más allá de fluidos en su estómago, no pudieron ver nada más en sus órganos. Finalmente, un escáner especial en sus ovarios y apéndice revelaron un impactante diagnóstico: tenía cáncer de ovarios en tercera fase.
Los exámenes revelaron una “masa” de entre 11 y 13 centímetros que recorría ambos ovarios, convirtiéndolo en uno solo. “No podía creer lo que estaba escuchando”, relató. “Nunca pensé que a los 18 años estaría batallando contra una enfermedad tan brutal”, agregó.
El 26 de septiembre la prepararon para una histerectomía completa, que no sólo buscaba remover el tumor, sino que también todos los órganos afectados: sus ovarios, óvulos y útero. “A esta edad, remover estas partes de mi cuerpo no sólo es aterrador, también me rompe el corazón”, escribió.
“Siempre soñé con tener mis propios hijos y tener una familia. Amo a los niños tanto, que saber que nunca tendré un hijo con mis propios genes y características me derriba”, detalló en esta pagína poco antes de pasar por el quirófano.
Por suerte, su cirugía salió bien y el médico fue capaz de salvar sus ovarios y útero. Lamentablemente, al abrirla descubrieron miles de pequeños tumores esparcidos por todo su abdomen, por lo que están estudiándolos para determinar tratamientos posteriores, como quimoterapia.
“Pero de momento, Riley debería experimentar una recuperación más rápida de la que imaginábamos”, escribió su hermana, quien afirmó que para ella fue “un milagro” todo lo que ocurrió.
