Una enfermera falleció producto de una severa anorexia y que pudo ocultar gracias a sus conocimientos médicos, pues era especialista en desórdenes alimentarios.
Laura Charles, de 29 años, pesaba 35 kilos cuando falleció en el pasillo de su casa ubicada en la zona de Kingstanding, Birmingham, Inglaterra, en marzo pasado.
Lee también: ¿Mal ejemplo? Buscan bajar de Internet a ‘youtuber’ que pesa apenas 27 kilos
Un patólogo señaló que una mujer de su edad y estatura, debería haber pesado mínimo unos 54 kilos. No obstante, una investigación arrojó que la mujer “manipulaba” el sistema para que nadie pudiera ver lo flaca que estaba, apartándose de su familia.
Ellos creen que se pudo haber salvado si se hubiese internado en el hospital pero como supuestamente no había camas disponibles en el hospital, estaba tratándose en su casa.
Laura cancelaba regularmente sus citas médicas mientras estaba en proceso de ser considerada una paciente para la Ley de Salud Mental que permite internar a personas con problemas sin contar con su consentimiento. Además, se daba de alta a sí misma cuando estaba en pleno tratamiento y contra los consejos de los doctores.
La joven comenzó a perder peso en 2013, cuando los doctores le dijeron que debía eliminar varios alimentos luego de sufrir una úlcera gástrica. En ese entonces pesaba entre 60 y 63 kilos y era una chica activa y saludable.
Pero al momento de su muerte, Laura sobrevivía con apenas 500 calorías diarias y hacía mucha caminata para poder ‘quemar’ lo poco que comía.
Hanna Bruce, la enfermera de la unidad de salud mental que se hacía cargo de Laura, señaló: “Era muy amorosa, una de las chicas más dulces con las que he trabajado. Ella era una enfermera de salud mental registrada y muy inteligente, súper amable y era un verdadero placer lidiar con ella“.
Tras la investigación, el padre de Laura, Robert, señaló acongojado que si en el hospital hubiesen tenido camas disponibles, su hija aún estaría con ellos. Su madre, Adela, en tanto, agregó: “Si hubieran intervenido antes, en vez de cuando Laura estaba muy baja de peso, podría haber tenido más posibilidades de recuperarse“.
Su hermana, Clare Charles, comentó que su hermana ‘sabía todas las respuestas correctas’ a sus preguntas, sin embargo, aceptaba que necesitaba ayuda. Ella quiso volver al hospital, no quería morir. A pesar de que estaban preparando todos los papeles para internarla, no pudo llegar a eso.
“Laura tenía todas sus cosas empacadas. Se consiguió todas las temporadas de la serie Sex and the City para verlas cuando estuviera hospitalizada. Estaba lista para internarse“, reveló.
La forense Louise Hunt determinó que la joven tuvo una muerte súbita inexplicable con un cuadro de epilepsia combinado con anorexia.