Hace unos días, la conocida rostro de la televisión y comediante Paty Maldonado confesó haber consumido anfetaminas durante su juventud para mantenerse delgada. Su sinceridad permitió que otras faranduleras hablaran sobre el tema, como es el caso de su colega Pamela Díaz.
La panelista se encontraba conversando en el matinal de CHV, cuando de pronto reveló que también tomó estas pastillas durante tres años: “Yo estaba tomando para adelgazar, estúpidamente, estúpidamente. Y sí me arrepiento, porque me dio un alza de presión. Y la Paty ese día llegó hinchada. Se le hincharon los pies y no le entraron los zapatos y teníamos que entrar al aire…Y no te estoy mintiendo”, fueron parte de sus declaraciones.
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“Yo siempre he dicho ‘yo no soy ejemplo de nadie’. En general, la gente se automedica, y lo tiene clarísimo la gente en su casa. La anfeta hoy en día se puede conseguir con doctores que son bastante conocidos”, señaló, tal como recoge el medio SoyChile.
“La Fiera” aseguró que tras esto que tomó “muy pocas dosis, porque necesitaba adelgazar y mi cuerpo lo necesitaba”, pero hoy dice haberlas dejado porque le subían la presión arterial y “terminaba entera, como una serpiente”.
Las anfetaminas son un estimulante del sistema nervioso central. Esta droga suele ser usada con fines terapéuticos, para mejorar el rendimiento deportivo o por recreación. Si bien es ilegal consumirla sin receta médica, muchos las consiguen a través de “arreglos” con profesionales o directamente, del tráfico de fármacos. Sus efectos van desde la euforia, vista borrosa y exceso de energía hasta los vómitos y ataques de ansiedad.