Hace un año y medio que el rostro de Francisca Merino no se ve en la pantalla chica. Salió del programa farandulero SQP con prenatal y hace 6 meses venció su contrato con Chilevisión, situación que la mantiene cesante.

Pero lejos de quedarse en un difícil año que le arrebató a su papá, Ernesto Merino, “Pancha” ya comenzó a mover sus contactos para encontrar una pronta solución al problema que la mantiene en su casa, y esta semana les avisó a sus amigos y conocidos que necesita trabajar.

A pesar que el trabajo no ha sido tema este año para ella, el motivo de su búsqueda incansable se debe a que no quiere ser una mantenida. “Esa no es mi realidad, nunca he querido ser mantenida porque me baja demasiado mi autoestima. Desde los 22 años que soy independiente económicamente”, contó en una entrevista al medio nacional LUN.

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También confesó que la muerte de su papá la llevó a realizar un trabajo de humildad “porque cuando uno sufre se humaniza más”, e incluso aseguró estar “súper simpática y cero peleadora”.

Eso sí, de llamar pidiendo pega, nada. El movimiento de fichas de Pancha es todo a través de las redes sociales. “He mandado puros WhatsApp. Les pongo a todos lo mismo: ‘Hola, tanto, pucha lo único que quiero es trabajar ahí, así es que avísame si se abre un espacio’”. “No soy de e-mails”, detalló.

Rodrigo León, productor de Intrusos de la Red, afirmó que si Francisca volviera a la televisión el próximo año como panelista, “debería ganar desde 1 millón y medio de pesos o 2 millones y medio mensuales para arriba dependiendo del programa y del canal por tres horas al aire”. A eso agregó también que “si regresa como animadora, el sueldo sería el doble”.