El Juzgado de Garantía de Coquimbo decretó la medida cautelar de prisión preventiva para Mirta Ardiles, imputada por los delitos de parricidio e incendio.

La mujer es la principal sospechosa de la trágica muerte de su hija, Melissa Chávez (12), a quien –según señala la investigación- habría infringido como presunta autora de la muerte de su hija, Melissa Chávez (12), a quien habría propinado heridas fatales en el mes de noviembre de 2020.

La menor fue encontrada sin vida tras un incendio en su vivienda, en Villa Talinay, lo que llevó a pensar que se trataba de una muerte accidental por inhalación de monóxido de carbono. Sin embargo, las indagatorias revelaron que su deceso había sido provocado por terceros previo al siniestro.

Melissa presentaba lesiones en su cabeza y en el cuerpo, producidas con un arma corto punzante. De inmediato su madre y su padrastro (Luis Santander) fueron sindicados como presuntos autores del delito, iniciándose las indagatorias.

La formalización

Tras recopilar los antecedentes suficientes, el Ministerio Público ordenó detener y presentar ante la justicia a Mirta Ardiles.

Según detalló la Fiscalía en la audiencia, la mujer habría llegado a la habitación de su hija premunida con un cuchillo cocinero cerca de las 10:30 horas de la mañana del 26 de noviembre.

Melissa se encontraba sobre la litera superior del camarote de su dormitorio, cuando la imputada la habría atacado con el arma, propinándole un total de 11 estocadas en distintas partes del cuerpo.

Luego de la agresión, y mientras su hija agonizaba, Ardiles habría iniciado un incendio en el colchón inferior de la litera, huyendo del lugar.

Cabe recordar que desde la muerte de la menor, la mujer ha negado los hechos. El tribunal fijó un plazo de 180 días para la investigación formal del Ministerio Público.