No cabe dudas que la reaparición pública de Meghan Markle este fin de semana fue uno de los puntos más altos de la ceremonia militar conocida como Trooping the colour, y que se celebra con ocasión del cumpleaños oficial de la monarca.
Como era de esperarse, la duquesa de Sussex acaparó todas las miradas de los asistentes al evento, y en medio de este ‘alboroto’, hubo un detalle que no pasó desapercibido. Un accesorio que complementó su look y que tiene una interesante historia.
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Se trata de un anillo que la exactriz lució junto a sus sortijas de compromiso y matrimonio. La joya, conocida como el “anillo de la eternidad”, representa el amor sin fin y, de acuerdo a la revista People, fue un regalo de su esposo, el príncipe Harry para su primer aniversario de matrimonio el pasado 19 de mayo y por el nacimiento de su hijo Archie.
Según la publicación, estas joyas se fabrican, tradicionalmente en oro o platino, con incrustaciones de diamantes.
Además, cabe señalar que Meghan no es la única integrante de la familia real que lleva una sortija así, pues al parecer es una tradición de hermanos, ya que el príncipe William le regaló una similar a su esposa Kate Middleton, tras el nacimiento de su primer hijo, el príncipe George.