MasterChef es uno de los programas más exitosos alrededor del mundo, no por nada destacados cocineros han sido parte del jurado.
De hecho, en los diferentes países donde se emite el espacio, cuentan con la misma modalidad, ya sea en sus formatos Junior, Celebrity, o con concursantes populares.
Asimismo, otra práctica que se repite es la intervención de los participantes en medio del programa, donde van entregando sus impresiones sobre los desafíos, preparaciones, disputas y momentos que pueden ser polémicos en formato de entrevista.
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Sin embargo, muchos se preguntan cómo se realizan estas entrevistas, ya que el programa se muestra como si la grabación fuese de corrido, y ningún concursante parara de cocinar para ir y dejar en una cápsula sus impresiones, una duda que te despejaremos a continuación.
En conversación con con Página 7, la última eliminada de MasterChef Celebrity, Botota Fox, entregó los detalles de dichos registros, los cuales -aseguró- son grabados en dos períodos.
“Cuando cocinamos el primer plato inmediatamente decían ‘a entrevista’, y ahí grabábamos todo lo del primer plato. Cuando terminábamos de hacer el segundo plato, también nos decían ‘ya, a entrevista'”, contó.
Dicha práctica, según la exparticipante se volvía muy tediosa al inicio, cuando eran 18 los participantes del formato, puesto que se demoraban “eternamente”.
¿Cómo se logran dichas entrevistas?
Según reveló Botota, todo consistía en seis “entrevistaderos” (como les llamaban), donde hay uno de ellos que les preguntaba de temas bien amplios y no tan específicos. “Me decían: ‘¿Cómo te sentiste hoy día Botota?’, ¿qué te pareció cuando hoy día cocinaste esto?, cuéntame'”, explicó.
Por lo anterior, las respuestas -dijo- debían ser siempre en presente y no tenían que hablarle directamente a la persona, sino que a la cámara. “Era como: ‘¡Ay! llegó el día” y tenía que decir: ‘Estoy cocinando, no sé qué me va a tocar’, pero yo ya había visto todo”, dijo.
Además, esto último se hacía más complejo, puesto que ya los platos estaban preparados, entonces debían intentar replicar sus impresiones lo mejor posible para que fuera natural.
“Como que hablábamos siempre así. No me costó al principio porque yo soy bien ‘zorra’, pero de repente se nos olvidaba”, señaló.
Al mismo tiempo, manifestó que en caso de que se equivocaran, debían volver a grabar, pero había bastante libertad para comentar lo que pasaba, siendo el único requisito el hablar en presente, lo que se compara con una transmisión en vivo de Instagram.
Extensas jornadas de grabación
Por otro lado, la exconcursante contó que las grabaciones del espacio son bastante extensas, siendo jornadas que se extendían desde aproximadamente las 09:00 hasta las 19:00 horas, con un periodo de colación.
“Hacíamos un plato temprano, estábamos maquilladas y arregladas a las 9 de la mañana. Ahí terminábamos de grabar el primer plato a las 13:00 horas. Después almorzábamos, nos daban una media hora, grabábamos el segundo plato y había veces que terminábamos a las 20:00 horas de grabar todo”.
Dichas jornadas eran las mismas los días lunes, martes, jueves y viernes. “Los miércoles teníamos solo capacitación en la mañana, y el sábado había de repente capacitación en la mañana, pero casi siempre nos daban libre el fin de semana”, concluyó.