Una de las actrices más icónicas de Chile es Yael Unger, quien participó en teleseries emblemáticas como La Madrastra, Estúpido Cupido, Aquelarre y Amores de Mercado, entre otras. El año 2002, la vimos por última vez en una ficción audiovisual gracias a su participación en El circo de las Montini.
Después de este papel “final” en la pantalla chica, la vida de Julia Gabriela Unger Kremer (nombre real de la actriz) dio un giro completo. “Me di cuenta de qué me hacía falta. Uno cree estar conectado, pero la conexión es más profunda. Estaba buscando esa paz interna y me di cuenta de que yo pensaba que me quería, que me amaba, pero no era así”, dijo al matinal Muy Buenos Días de TVN, en 2019.
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En la búsqueda de ese crecimiento personal, vio en una revista que vendría a Chile una maestra a dar un seminario sobre Isha. “(Cuando) ella dice: ‘Cuando nos sanamos a nosotros mismos, traemos paz al mundo’. Sentí en mi corazón que ahí estaba, esto era”, afirmó Yael a la revista Shalom.
Después de ese descubrimiento, y ya con 62 años, se deshizo de todo lo material y se fue a vivir a Colombia, donde estaba el Centro Isha. Eran un grupo de 30 maestros que junto con Isha vivían en comunidad. “Nuestro foco es la expansión de nuestra propia conciencia y la de toda la humanidad”, aseguró.
Una vida de cambios
Pero esa no fue la primera vez que Yael Unger tomaba una decisión radical para su vida. De padres judíos, que escaparon de Hungría a Uruguay entre la primera y segunda Guerra Mundial, se vinieron a Chile cuando ella tenía cinco años. Luego de terminar el colegio, Yael estuvo un año en Israel, en la Hajshará (capacitación) de Hanoar Hatzioní, y decidió quedarse a vivir en dicho país.
Después de seis meses en Jerusalén, tiempo en el que estudió hebreo, nació su hija Dafna. Luego se mudaron a Ramat Hasharón, cerca de Tel Aviv. Sin embargo, su matrimonio no iba bien, por lo que decidió regresar a Chile.
Su amor por el teatro la hizo cursar estudios nocturnos de actuación en la Universidad de Chile y luego entró a la Escuela de Teatro Experimental en la misma universidad, egresando en 1969, mismo año que comenzó una relación amorosa con el director teatral Gustavo Meza.
En 1972 actuó en su primera teleserie, y en 1974, junto a su compañero actor Tennyson Ferrada, fundaron la compañía Teatro Imagen.
Tras haber participado en algunas teleseries, en el año 1981, con su rol protagónico en La Madrastra, su imagen se consagró entre los televidentes.
Después de 30 años actuando en la pantalla chica, Yael hace este cambio radical a su vida. “Me encanta actuar; también dirigir, pero ahora no es a lo que quiero dedicar mi vida. Ahora mi foco está en expandir mi conciencia hasta alcanzar la conciencia humana completa y ayudar a expandir la conciencia de toda la humanidad”, dijo Unger al respecto.
Qué es el Sistema Isha
Isha Judd es la creadora del Sistema Isha, el cual busca el autoconocimiento y expansión de la conciencia. A través de su Fundación Educativa, Judd reunió a un equipo de profesionales para elaborar un programa integral que abarcara todos los niveles de la educación y otras áreas de aprendizaje.
“El Sistema Isha es un método integral de autoconocimiento que nos permite encontrar una experiencia de paz, amor, felicidad y silencio interno, dentro del movimiento de la vida moderna“, aseguró Yael Unger.
“Desde esta conexión profunda con uno mismo, aprendemos a transformar todos los aspectos de nuestras vidas y explorar el potencial que tenemos en su totalidad”, añadió.
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Según ha explicado ella, se trata de un sistema totalmente a base de experiencias, que no pasa por el intelecto. “Es una herramienta ideal para ser integrada a tu vida en estos tiempos vertiginosos, sin que te agarre el estrés”, dijo.
Actualmente, Unger está alejada de los medios de comunicación y totalmente abocada a la práctica del Sistema Isha en México, desde donde continúa dictando seminarios online.
El nombre espiritual de Yael es Ishani, que significa la perfecta encarnación de la conciencia crítica en la forma femenina.