Gracias a la disminución de casos de COVID-19, poco a poco los espectáculos masivos comienzan a regresar.
Uno que se encuentra contento con esta medida es Zalo Reyes, quien luego de una gran cantidad de tiempo volverá a presentarse frente a su público.
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Este martes 31 de agosto, el denominado “Gorrión de Conchalí”, realizará su retorno a los escenarios. “Después de 18 meses, 559 días, de la noche del 29 de febrero del 2020 en Rancagua. Después de que lamentablemente muchos partieron”, comenzó relatando.
“Tras 18 meses de encierro con menos energía física pero con el corazón ansioso. Quizás con pocas cosas para contar producto del encierro, pero feliz de por fin volver a escena”, anunció en sus redes sociales.
“Es mi debut”
En conversación con La Estrella de Valparaíso, el artista comentó que “me siento raro, ha sido un año y ocho meses que no actúo con público”.
El músico se presentará en las parrilladas La Chingana del Barrio a las 20:00 horas, con aún reservas disponibles a 35 mil pesos, y en donde compartirá con su banda integrada por cuatro músicos.
En esa misma línea, el artista reveló cómo le afectó económicamente la pandemia. “En un año y nueve meses el billete ha estado mal, es difícil”, aclaró.
“Se me acabó la plata y tuve que vender el auto. Por ahí me anduvo alcanzando”, indicó.
Además, el intérprete de Un ramito de violetas, detalló que durante la crisis sanitaria se preparó con su nieto. “Se volvió director artístico”, dijo.
“Tiene 23 años y voy a estar con él comandando la banda, es mi debut con Boris Andrés”, concluyó.
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