Hace tres años, Alvaro Morales partió con eventos donde lleva una mini pizzería al lugar que pida el cliente, pero la pandemia lo hizo abandonar el negocio y solo pudo retomarlo en septiembre.

Y es que tras el fin de las restricciones sanitarias y luego de su aparición en El Discípulo del Chef, el destacado actor nacional ha tenido una explosión de pedidos.

“Tengo cerrado todos los fines de semana hasta diciembre, ahora estoy viendo fechas para enero”, relató a Las Últimas Noticias sobre su emprendimiento, llamado Pizza Rica Eventos by Álvaro Morales.

El intérprete explicó de qué se trata. “Llevamos un horno napolitano a gas hecho en Italia, que llega a 400 grados y tiene una base de roca volcánica, y la gente ve cómo se prepara la pizza en el mismo momento, con distintos ingredientes”, señaló.

“Cuando lo hacen yo los llamo y les explico cómo funciona el evento, es una atención personalizada. Yo trato de ir y es el mismo servicio para todas las personas, estén en Buin o La Dehesa”, agregó.

 

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Asimismo, el intérprete reconoció que él mismo cocina. “Voy con una o dos personas, pero tratamos de no llevar mucha gente por el protocolo COVID”, contó.

En cuanto a los precios, Morales detalló que “si es fuera del Gran Santiago cobramos más por la bencina, pero es alrededor de 140 a 150 mil pesos la hora”.

“Pero es open bar pizza, salen pizzas medianas, con ocho porciones y cada tres minutos. En la hora hacemos entre 15 y 20 pizzas. Puedes contratar por una hora y si el evento es más grande, pueden ser más horas o con dos hornos”, aclaró.