Diana Bolocco figura en la reciente edición de la revista ¡Hola! Argentina, donde abordó diversos temas, entre ellos, su relación con su hermana mayor, Cecilia Bolocco.
Y es que la ex Miss Universo es una reconocida figura al otro lado de la cordillera. Por lo mismo, no desaprovecharon la oportunidad para consultarle sobre ella.
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Diana Bolocco sobre su defensa a Cecilia
En concreto, le preguntaron por las veces que ha salido a defenderla de las críticas, indicándole que se convirtió “en una suerte de vocera”.
Sin embargo, Diana no coincidió con este rol que le adjudicaron. “Nunca he pretendido ser la vocera, ni mucho menos”, partió señalando.
“Me carga hablar por ella y jamás he respondido una pregunta por ella. Pero si te estás refiriendo a una vez en particular, cuando se le cuestionó su rol de madre desde Argentina, yo me sentí en la necesidad de salir a respaldarla públicamente”.
“Creo que uno tiene que alzar la voz cuando es algo muy injusto. Me parece que hay cosas que son inaceptables”, continuó.
Consultada si esta crítica fue lo que más le ha dolido de todo lo que se ha dicho de Cecilia, la conductora de Gran Hermano fue clara.
“No, me han dolido muchas cosas, pero ahí sí sentí la necesidad visceral de salir a respaldarla. Porque claro, ella no iba a salir a responder… como no lo ha hecho nunca. Espero no tener que volver a hacerlo más”, comentó.
La enfermedad de su sobrino, Máximo Menem
En la entrevista, a Diana también le preguntaron por cómo vivió la enfermedad de su sobrino, Máximo Menem, a quien en 2018 le diagnosticaron cáncer.
“Fue devastador para todos, imagínate. Muy difícil, pero también muy asombrada de su capacidad y de todo lo que él creció internamente con un proceso tan doloroso. Y también de la Cecilia”, expresó.
La periodista contó que su hermana “lo abandonó todo y estuvo al lado de él las 24 horas del día, dejando su dolor a un lado para apoyar a su hijo, que estaba sufriendo”.
“Yo no pude acompañarlos a Estados Unidos para su tratamiento. En ese momento estaba haciendo un programa matinal, tenía que estar todos los días al aire. Me sentía muy lejos, impotente, aunque estábamos a través del teléfono“, detalló.
“Aunque suene terrible decirlo, tanto él como Cecilia sacaron cosas buenas de ese proceso. Máximo se convirtió en un hombre, supersabio, muy centrado, fuerte“, concluyó.