Paula Pavic no para. Ya no le basta con despertarse diariamente a las 4.45 AM, como uno de sus hábitos para el desarrollo personal y cambio de mentalidad, sino que ahora “subió un nivel” de incomodidad.
La expareja de Marcelo Ríos compartió una storie de Instagram, anunciando este nuevo cambio en su rutina diaria.
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“Me acostumbré tanto a despertar a las 4.45 AM y a hacer burpees a las 5.30 AM, que ahora tenía que subir a un nuevo nivel de incomodidad. Desde hoy parto con el agua fría“, explicó Pavic.
Junto con esto, se mostró en la ducha con agua helada.
“Me voy a comprar un freezer en cuanto pueda, pero mientras, comienzo con duchas de agua fría por dos minutos (que en Floridad no son tan frías -20°-)“, manifestó.
Por último, sostuvo que “yo tengo un tema con el frío, así que eso para mí ya es muy incómodo”.
¿Es recomendable el nuevo hábito de Paula Pavic? Esto dice una especialista
Beatriz Arteaga, Directora Escuela de Enfermería de Universidad de Las Américas, analizó este nuevo hábito de Paula Pavic.
En este sentido, explicó a Página 7, que ducharse con agua fría “es una tendencia que se viene dando en la última década, pero al revisar la evidencia científica actualizada, esta no es robusta para determinar que existan más beneficios“.
“Lo que sí se sabe es que el agua fría, al incorporarla de manera abrupta en una ducha, provoca vasoconstricción periférica, es decir, se contraen los vasos sanguíneos, los músculos y la piel. Esto provoca aumento de la frecuencia cardíaca, del tono venoso y de la presión arterial, por el gasto cardíaco”, agregó.
Asimismo, indicó que con lo anterior, “hay un mayor esfuerzo del corazón por bombear sangre hacia la periferia del organismo”.
Junto con ello, relató a nuestro medio que sí existen beneficios del agua helada, ya que reduce la inflamación y el dolor de las piernas; y aumenta el metabolismo orgánico, pero también existen algunas precauciones que hay que tener en cuenta.
“Existe riesgo cuando estas duchas frías son muy prolongadas o a temperaturas muy bajas en personas que tienen cardiopatías o problemas al corazón, porque podría favorecer a un aumento de la presión arterial”, dijo Arteaga.
También enfatizó que “los cambios bruscos de temperatura corporal, predisponen a enfermedades respiratorias, sobre todo en personas con enfermedades crónicas, como asma, efisemas o fibrosis pulmonar“.
“Por lo tanto, la recomendación es que las personas que tienen problemas cardíacos, tengan mucha precaución con el abuso del agua helada, por períodos prolongados o sobre todo con agua muy fría”, sentenció.
