La familia de un niño inglés de 12 años de edad decidió compartir las fotos de las impactantes lesiones que sufrió al ser atropellado por una camioneta fuera de su escuela. Se trata de una cruda advertencia para que otros menores de edad no pasen por lo mismo.
Levi Hames corría detrás de un compañero en plena calle, cuando fue golpeado por una camioneta que viajaba aproximadamente a 50 km/h. El impacto lo arrojó por más de 4 metros en el aire. De acuerdo al medio británico The Mirror, el niño fue trasladado al hospital donde se le determinaron lesiones leves tanto en la cabeza como en la cara.
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Como el accidente ocurrió cuando salía del colegio Noel-Baker de la ciudad de Derbyshire (Reino Unido), la familia del estudiante subió fotos de él cubierto de sangre y en la camilla de hospital, como una advertencia para el resto de los estudiantes y niños.
Levi, pasó una noche en el hospital con una hemorragia en el cerebro antes de regresar a su casa en Ilkeston, Derbyshire. “Uno de mis compañeros corrió a través de la calle. No habían autos que vinieran de la izquierda y cuando crucé, oí a alguien derrapando y dando vueltas y de repente veo la camioneta venir hacia mí”, afirmó.
Además, agregó: “Me tiró en el aire pero tan pronto como aterricé en el suelo, me levanté y corrí sobre el pasto. No me dolió para nada en un principio, me sentí un poco sorprendido, pero unos diez segundos más tarde fue cuando el dolor llegó como una patada”. “No culpo al conductor. Fue mi culpa porque yo no estaba mirando”, afirmó Levi.
Donna Willis, de 37 años y mamá del niño, estaba en su casa cuando recibió una llamada de la escuela en la que le avisaban del accidente de su hijo. Ella dijo: “Fue horrible Pensé que estaba muerto. Al llegar estaba sorprendida de que no tuviera ningún hueso o algo más serio roto. Es muy afortunado.”
Por otro lado, Aaron Hames, de 42 años y papá de Levi, expresó: “Mi hijo estaba diciendo en la ambulancia que no se quería ir a dormir porque tenía miedo de no despertar, fue aterrador.”
La familia ahora está tratando de contactar a una alumna de la escuela que fue en la ayuda del pequeño, le dio su chaqueta y llamó al 999. “No sabemos quién es, pero nos gustaría saber para que podamos darle las gracias”, concluyeron.
