Ya sea porque quieres ir a una fiesta disfrazado de vampiro o zombie, o simplemente porque quieres asustar a alguien, saber preparar sangre artificial siempre será útil en estas fechas. Para conseguirlo no es necesario que compres caras pinturas y tampoco que te bañes en ketchup.

El portal del hogar Good Housekeeping experimentó con varios alimentos y este fue el resultado:

1.- Sangre rojiza

Kristine Brabson | Good Housekeeping
Kristine Brabson | Good Housekeeping

Esta sangre clara y corrediza es ideal para manchar cosas, como si acabaras de asesinar a alguien en tu baño. ¿Cómo conseguirla? Combina 1 taza de sírope de maíz con dos cucharadas de sírope de chocolate (son las típicas salsas que se ocupan para los helados). Luego, consigue tinte rojo para comida y mézclalo hasta conseguir el tono ideal (probablemente 8 gotas bastan).

Kristine Brabson | Good Housekeeping
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2.- Sangre desoxigenada

Kristine Brabson | Good Housekeeping
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Esta sangre viscosa y más oscura es genial para lucir más muerto que nunca. Incluso, puedes estamparla en las superficies con ayuda de un secador de pelo. ¿Cómo hacerla? Combina 2/3 de taza de salsa de chocolate con 1/3 de taza de detergente líquido. Luego, añade 4 a 6 cucharaditas de tinte rojo para alimentos. Ojo, que como lleva detergente no se recomienda para la piel.

Kristine Brabson | Good Housekeeping
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3.- Costras

Kristine Brabson | Good Housekeeping
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Para lograr la textura de unas desagradables costras, sólo necesitas de un par de elementos de tu cocina. ¿Cómo? Mezcla 2 cucharaditas de maicena, 4 cucharaditas de agua, 1 cucharada de sírope de maíz y luego agrega hojuelas de cereal y 4 gotas de tintura roja. Aplica en tu piel y déjalo secar.

4.- Interiores

Kristine Brabson | Good Housekeeping
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Para que tu madre piense que alguien “te dibujó una sonrisa en la guata”, sólo necesitas usar cualquiera de las recetas anteriores para preparar sangre y luego agregarle tiritas de confort. Sólo debes mezclarlo con la “sangre”, hasta conseguir la textura ideal. La bloguera de la página fue tan convincente, que su madre creyó que tuvo un accidente de cocina.