Cuando la casa del pequeño Nathaniel Stock comenzó a encenderse en llamas, el pequeño niño de 5 años no entró en pánico y gracias a su accionar, pudo salvar la vida de sus seres queridos. Hacía algunos días, los bomberos de San Bernardino, Estados Unidos, habían visitado su escuela, donde les enseñaron todo lo básico.
“Nos enseñaron a detenernos, lanzarnos y rodar en el pasto. Además, aprendí que debes gatear por el suelo en medio del fuego”, explicó el menor de edad al medio norteamericano Today. Apenas sintió el humo, alrededor de la 1 de la madrugada, agarró a su gatita, Aurora Mitten, su tablet para niños y llegó hasta la pieza de su abuela, Kimberly Racliss, para despertarla.
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Tras gritarle, “abuelita, hay fuego” y despertarla, ambos salieron corriendo de su casa en Phelan, California. “Nathalien hizo bien en mantener la calma y venir hacia mí. No la habría contado sin él”, declaró su abuela. Incluso, el pequeño intervinió cuando la mujer recordó que su Chihuahua, Tinkerbell Maria, seguía atrapada en el interior del hogar.
“Le dije que no puede volver a una casa en llamas y que tenía que esperar a que llegaran los bomberos”, explicó Nathaniel. Siete minutos más tarde, los profesionales llegaron y salvaron a la perrita, la cual estaba escondida tras la puerta del baño. Pero la mayoría de las pertenencias de esta familia se perdieron entre las llamadas.
El pequeño Nathaniel vive con sus padres y su abuela, pero aquel día su papá andaba de viaje por trabajo y su mamá andaba de viaje con sus hermanos. Ella volvió tan pronto se enteró de que había un fuego en su hogar y que los bomberos seguían allí.
Hasta que la casa sea recuperada, la familia debe vivir en una casa rodante en su propiedad. Gente de la comunidad les ha llevado comida, juguetes y otras cosas esenciales. “Nathaniel tiene más ropa y juguetes de los que tuvo antes”, explicó su madre.
Los bomberos recordaban al niño y decidieron realizar una ceremonia especial de premiación, donde le dieron una placa por su heroísmo, la cual no se la saca desde entonces. “Él es mi héroe”, afirma su abuela.