La princesa Eugenia y su esposo, Jack Brooksbank, rechazarán un título real para su futuro hijo o hija de ser ofrecido por la Reina, porque quieren que viva una “vida normal”.

Al menos así lo dio a conocer la revista Vanity Fair, desde donde citaron a fuentes cercanas al Palacio que aseguraron que la pareja considera un título como especie de “maldición”.

Incluso si la Reina les ofreciera un título como regalo, Eugenia o Jack no desean que su hijo tenga uno“, afirmó un amigo de la familia.

Eugenia sabe que un título puede ser tanto una maldición como una bendición, y ella y Jack quieren que su hijo lleve una vida normal y, finalmente trabaje para ganarse la vida. Los títulos realmente no les importan a Jack y Eugenia, solo quieren un niño feliz y saludable“, puntualizó.

Además, reveló que el matrimonio planea criar a su hijo en Ivy Cottage, en el Palacio de Kensington, donde han estado viviendo desde su boda en 2018. “Fue pensado para ellos como un hogar familiar y no tienen planes inmediatos de mudarse”, sostuvo la fuente.

El matrimonio está encantado de esperar a su primer bebé a dos años de su unión y solo esperan que, a pesar de haber nacido en el puesto 11 en la fila para el trono, tenga una vida lo más normal posible.

El bebé, que nacerá a principios de 2021, será el noveno bisnieto de la reina Isabel y el primer nieto del príncipe Andrés y su exesposa, Sarah Ferguson.

Recordemos que la noticia del embarazo de la nieta de la Reina se conoció el viernes pasado, a través de un anuncio oficial del Palacio de Buckingham.

Alejadas de la realeza

No hay que olvidar que Eugenia y Beatriz fueron las primeras nietas tituladas en continuar una carrera en el sector privado, en lugar de convertirse en miembros de la realeza.

La princesa Eugenia es directora de la galería de arte Hauser&Wirth, mientras que la princesa Beatriz trabaja en una oficina en Londres, perteneciente a una empresa de tecnología con sede en Estados Unidos.