La tarde de este lunes, el actor y comunicador Matías Vega estuvo invitado al programa Más Vivi que nunca, donde conversó de su presente laboral, su participación en el estelar de imitaciones The Covers, y también sobre su actual relación de pareja con Sandra Ortiz.
A la joven -que es modelo, actriz e instructora de una disciplina llamada Flowback Fitness- la conoció justo antes de que se desatara la pandemia de coronavirus en Chile, por lo que fue muy difícil para él llevar adelante el proceso de conquista.
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Según detalló en el programa de TV+, él y Sandra comenzaron a mensajearse, enviándose fotos y bromas, pero también audios de animales, lo que llamó la atención de la animadora y el panel.
Entonces, el propio Matías se encargó de explicar que su sonido favorito era el de gatitos, pues se enviaban maullidos y ronroneos que los mantenían conectados, y aclaró que eran sonidos hechos por ellos.
Miedo al compromiso
Desde que inició el romance, Matías Vega reveló que han pasado dos años, “pero partimos pololeando ayer, de verdad”, detalló.
Vivi Kreutzberger le preguntó, entonces, por qué se había demorado tanto tiempo, si acaso no estaba seguro de lo que sentía por Sandra.
“No sé si fue por la pandemia o porque he tenido cargas de otras relaciones, entonces siempre me dio miedo comprometerme. Cuando me veía muy comprometido, decía ‘pucha, mejor no’“, reconoció el ex Club de los Tigritos.
“Hemos pololeado y hemos terminado entre medio. La palabra me asusta. Me asusta estar comprometido y no ser como ‘el hombre libre'”, explicó también.
Sin embargo, cuando estaba sin ella, se dio cuenta de que en verdad se sentía triste, y que todo respondía a sus propios miedos e inseguridades, pues no dejaba de hacer las mismas cosas que cuando estaba soltero.
“Ya es como la tercera vez que le pido pololeo. Estábamos ya pololeando, pero yo me asustaba y me arrancaba”, concluyó, aclarando que ahora se siente más seguro de querer comprometerse emocionalmente con su polola.
