La noche de este miércoles, la tercera temporada de ¿Quién es la Máscara? llegó a su fin, revelándose la identidad de los tres finalistas. Una de ellas era Denisse Malebrán, que interpretó a Caperuza.
“Era algo totalmente distinto a lo que había hecho antes en televisión”, dice la cantante sobre su motivación a aceptar la oferta.
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“Desde El Termómetro, en el año 2002 a la fecha he hecho mucha tele y esto era un regalo más, poder jugar a ser un personaje oculto. Acepté altiro, porque lo encontré súper entretenido para cerrar el año y partir uno nuevo”, agrega Malebrán a Página 7.
Respecto a qué le pareció su disfraz, la vocalista de Saiko es categórica: “Me encantó, era precioso el traje, eran súper bonitos todos los detalles”, manifiesta la intérprete, que en redes sociales ya había sido descubierta por algunos televidentes.
Ella sostiene que harta gente le preguntaba si era Caperuza: “Yo me hacía la loca”, cuenta, aunque las extensas jornadas de grabación hacían sospechar a sus cercanos. “Más de alguna vez se me salió ‘estoy en el canal'”, reconoce, aunque luego mentía diciendo que estaba grabando Pasapalabra.
En la final, la exparticipante de The Covers, indicó que de haber ganado el premio, lo hubiese invertido en una fundación de rescate animal, idea que refuerza en conversación con nuestro medio.
“Quería donarlo a tres refugios de rescate animal: uno que es una granja donde reciben todo tipo de animales; otro era un lugar donde reciben perros y el otro donde reciben gatos, pero no me resultó”, se lamenta.
Casi abandona el programa
Cuando habla de lo más difícil que le tocó enfrentar en el programa, Malebrán no lo piensa dos veces: “Me enfermé en la mitad del programa”, dice, añadiendo que “estoy con un problema de litiasis, que es cuando empiezas a botar cálculos renales”.
“En algún momento, en la mitad de las grabaciones, dije ‘no aguanto más, voy a tener que ir a Urgencias’. Y estuve en la clínica, pero tuve ene apoyo de mi urólogo y entre todos me ayudaron y logré terminar el programa, porque en algún momento pensé que no lo lograba“, admite.
“Decía ‘oh, voy a tener que abandonar el programa, porque estoy muy enferma’. Llevaba dos semanas grabando el programa con antibióticos, antinflamatorios, con todo, pero no lograba sentirme mejor. Pero finalmente pude”, relata la cantante.
Incluso recuerda que la operación pudo ser una opción: “Recuerdo un lunes que me fui a la clínica, porque no aguantaba más el dolor y necesitaban hacerme un escáner para ver si podía botar las piedras o no, porque si no, me tenían que operar“, cerró sobre la cirugía que finalmente no fue necesaria.
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