Las tropas rusas han entrado en Kiev, al día siguiente del comienzo de la invasión ordenada por el presidente ruso, Vladímir Putin, cuyo Gobierno plantea volver a la vía diplomática si Ucrania depone las armas.
La entrada militar se produjo por el distrito kievita de Obolón, informó este viernes el Ministerio de Defensa ucraniano, que detalló que la avanzadilla rusa está integrada por un grupo de exploración y sabotaje ruso.
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En ese contexto, el Ministerio de Defensa ucraniano pidió a la ciudadanía informar sobre cualquier movimiento de equipamiento bélico del enemigo y preparar bombas Molotov para “neutralizar al ocupante”, pero llamó a los civiles a la precaución y evitar salir de sus hogares sin necesidad.
Combates en varios lugares
La irrupción de un grupo de soldados rusos en la capital ucraniana estaba precedida de combates en varios puntos del país. Así, fuerzas ucranianas se enfrentaban en la localidad de Ivanki, a 80 kilómetros de Kiev, a tanques rusos que avanzan en dirección a la capital desde las regiones próximas a la antigua central nuclear de Chernóbil.
La viceministra de Defensa, Hanna Malyar, advirtió previamente en su cuenta de Facebook de la posibilidad de que el Ejército ruso ocupe Vorsel, a 35 kilómetros de la capital, y los pueblos aledaños.
Rusia pide a Ucrania que depongan las armas
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó este viernes que Rusia está dispuesta a volver a la diplomacia si las fuerzas armadas de Ucrania entregan las armas.
“Estamos dispuestos a negociar. Siempre y cuando los militares ucranianos respondan al llamamiento de nuestro presidente (Vladímir Putin), cesen la resistencia y depongan las armas”, dijo el jefe de la diplomacia rusa en rueda de prensa.
Además, Serguéi Lavrov, se negó a reconocer al Gobierno ucraniano como democrático al defender la operación militar iniciada la víspera por Moscú en Ucrania.
“No vemos la posibilidad de reconocer como democrático un Gobierno que oprime y utiliza métodos genocidas contra su propio pueblo”, afirmó en rueda de prensa junto al viceministro de Exteriores de la autoproclamada república popular de Donetsk, Serguéi Peresada.
“Nos han dejado solos”
En este contexto, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski lamentó que su país haya quedado “solo” para defenderse ante la invasión rusa, que se cobró al menos 137 vidas en las primeras 24 horas.
“Nos han dejado solos para defender nuestro Estado”, dijo Zelenski en un video publicado en la cuenta presidencial. “¿Quién está dispuesto a combatir con nosotros? No veo a nadie. ¿Quién está listo a dar a Ucrania la garantía de una adhesión a la OTAN? Todo el mundo tiene miedo”, afirmó.
El mandatario indicó que al menos 137 ucranianos, “137 héroes”, murieron durante el primer día de la ofensiva rusa y que 316 resultaron heridos durante los enfrentamientos.
Él además decretó también una movilización militar general para tratar de contener la ofensiva rusa que, en menos de 24 horas desde su inicio, ya llegó la capital de Kiev.
“Hemos recibido información de que grupos de sabotaje del enemigo han entrado en Kiev”, alertó Zelenski, que pidió a los ucranianos estar vigilantes y respetar el toque de queda.
El presidente aseguró que tanto él como su familia permanecen en Ucrania, aunque Moscú lo haya identificado a él como el “objetivo número uno”. “Quieren destruir políticamente Ucrania destruyendo a su jefe de Estado”, declaró.