Impacto a nivel nacional causó la muerte de un pequeño de 1 año y 5 meses en manos de su propia madre, Kimberly Medina.
El trágico hecho ocurrió la tarde del sábado 28 de julio de 2018 en Peñalolén, región Metropolitana, cuando la joven de 24 años le propinó ocho puñaladas al lactante.
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Tras ello, intentó suicidarse también con heridas cortantes, pero su madre llegó al lugar y la llevó de inmediato al Hospital Luis Tisné.
De acuerdo a BioBioChile, Medina avisó por Facebook que cometería el crimen, con un estremecedor mensaje: “Hoy, sábado 28 de julio, mi vida junto a la de mi hijo menor Maximiliano terminan”, escribió.
“Mi vida no tiene sentido, estoy vacía por dentro. Siento que nadie me quiere y no tengo un norte ni un sur. Con mi hijo menor nos vamos de este mundo, no quiero dejarlo en esta vida de mierda, rodeado de gente alcohólica y drogadicta”, agregó.
En el extenso texto, Medina también arremetió contra su madre, abuelos y pareja, por no estar cuando los necesitó. Sobre la primera, dijo que no le quiso hablar ese día porque le había “faltado el respeto” anteriormente.
Respecto a sus abuelos, los culpó de haber vivido una “infancia de violencia, sangre y maltrato psicológico”, y a su pareja de preferir a su familia antes que a ella y al niño.
Más adelante se despidió de su hijo mayor y lo llamó a ser lo que él quisiera, antes de pedir que la cremaran junto con el bebé al que mataría.
Kimberly Medina fue condenada por parricidio
El 14 de octubre de 2020, el Séptimo Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a la mujer a siete años de presidio efectivo por el delito de parricidio consumado de su hijo Maximiliano Ibáñez, informó Chilevisión Noticias.
De acuerdo con lo indicado en la sentencia, la pena fue rebajada en dos grados, ya que el tribunal tomó en cuenta el estado mental en que se encontraba Kimberly al momento de cometer el delito.
“Claramente, su salud mental estaba desequilibrada y las circunstancias que la rodeaban, para ella sin sentido, la llevaron a tan dramática decisión, en la que creyó su destino sería otro”, indicaron.
Sobre la muerte del pequeño, se estableció que la condenada “se hizo de dos cuchillos y con uno de ellos le infirió 8 puñaladas, producto de lo cual el menor fallece por traumatismos cervicales y torácicos por objeto cortopunzante”.
Cabe señalar que Medina permanece recluida en la custodia directa de la Cárcel de Mujeres de San Joaquín en Santiago.
Se trata de un lugar aislado del resto de la población penal, donde también cumplen su condena Johanna Hernández, asesina del profesor Nibaldo, María del Pilar Pérez, conocida como ‘La Quintrala’, y Jeannette Hernández, madre de los hermanos Rojo, consignó 24 Horas.
