Una nueva investigación revela que tomar té negro podría tener beneficios a la salud y estar asociado a un riesgo de mortalidad moderadamente menor.
Así lo detalla en un amplio estudio publicado el pasado lunes por la revista Annals of Internal Medicine.
El té es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo y es conocido por tener sustancias eficaces para reducir la inflamación. Estudios anteriores realizados en China y Japón, donde el té verde es muy popular, también sugieren beneficios para la salud. El nuevo estudio extiende las buenas noticias para la bebida favorita del Reino Unido: el té negro.
Un riesgo entre un 9 y un 13% menor
Expertos del Instituto Nacional del Cáncer de EE. UU. analizaron una gran base de datos de casi medio millón de adultos en el Reino Unido. A estas personas se les preguntó por sus hábitos de consumo de té y se les hizo un seguimiento de hasta 14 años.
El 85% de las personas estudiadas dijo beber té con regularidad y, de ellos, el 89% dijo beber té negro. Se tomó en cuenta una gran variedad de factores de riesgo como la salud, la situación socioeconómica, el tabaquismo, el consumo de alcohol, la dieta, la edad, la raza y el sexo.
New from @NIH: drinking black tea may be associated with a moderately lower mortality risk, especially among persons drinking 2 or more cups per day: https://t.co/C10fWRgZgc pic.twitter.com/1sk2Hw8WxH
— Annals of Int Med (@AnnalsofIM) August 30, 2022
Los análisis demostraron que un mayor consumo de té -dos o más tazas al día- se relacionó con un modesto beneficio: entre un 9 y un 13% menor de mortalidad por cualquier causa en comparación con quienes no bebían té. La temperatura de esta bebida, la adición de leche o azúcar o el consumo de café no cambiaron los resultados.
No es un estudio que pueda probar causa y efecto
La asociación se mantenía para las muertes por enfermedades cardíacas, pero no había una tendencia clara para las muertes por cáncer. Los investigadores no están seguros por qué, pero es posible que no haya habido suficientes muertes por cáncer para que se manifieste algún efecto, dijo la directora del estudio Maki Inoue-Choi.
Esta investigación, basada en la observación de los hábitos y la salud de las personas, no puede probar la causa y el efecto: “Los estudios de observación siempre plantean la pregunta: ¿Hay algo más en los bebedores de té que los haga más sanos?”, se preguntó Marion Nestle, profesora de estudios alimentarios en la Universidad de Nueva York.
“Disfrute su taza de té”
“Me gusta el té. Creo que es un buen bebestible. Pero sería mejor interpretar estos resultados de una manera prudente”, agregó Nestle.
En tanto, Inoue-Choi, asegura que no hay suficientes pruebas para aconsejar cambiar los hábitos del té: “Si ya bebe una taza al día, yo creo que eso está bueno. Y, por favor, disfrute de su taza de té”, concluyó la especialista.