Con la muerte de la reina Isabel, surgieron las interrogantes sobre los cuidados que deben tener los adultos mayores en los 80 y 90 años, y lo que es muy importante, cómo pueden mantenerse en la vejez lúcidos.
Para profundizar en el tema, en Página 7 conversamos con variados especialistas expertos en el área, quienes entregaron recomendaciones sobre el cuidado en la tercera edad.
“Toda la sociedad debe comprender el envejecimiento como una etapa de la vida. Se debe reconocer a los mayores desde su diversidad, con sus experiencias y capacidades. El objetivo en esta etapa es mantener al máximo las funciones físicas, biológicas, psicológicas, y sociales, porque claramente hay cambios”, partió señalando Beatriz Arteaga, directora de Enfermería de la Universidad de Las Américas.
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“Se debe precisar que esta etapa está caracterizada por enfermedades crónicas y medicamentos. Es importante mantener los controles de salud al día, de acuerdo a sus enfermedades. A su vez, la terapia farmacológica debe ser rigurosa para mantener el estado de salud estable”, agregó.
Por su parte, el geriatra de la Clínica Vespucio, Roberto Concha, detalló que “es una realidad mundial que este grupo etario aumenta cada vez más. Debemos tener mayor preocupación porque son adultos mayores que cada vez se vuelven más frágiles en relación con su potencia física, sus músculos, etc”.
En ese sentido, especificó que hay que tener cuidado con los golpes, ya que “fácilmente pueden tener caídas y originar fracturas o lesiones”.
Prevención de caídas y salud mental
Arteaga señaló que lo principal es prevenir, porque “es uno de los trastornos importantes a cuidar. Hay que estar atentos en la prevención, como en el uso de antideslizantes y de barandas. También se debe cuidar la higiene, el baño y la ropa”.
“El área de recreación es importante, el contacto con un grupo de pares y realizar actividades como lecturas, juegos de mesa y el apoyo familiar es relevante a esta edad”, añadió.
Por su parte, Eugenia Escorza, psiquiatra de Clínica Dávila, detalló que para que un adulto mayor llegue saludable “es fundamental tener conocimiento de sí mismo, tener un buen control médico y que sea periódico, y una vida y rutina saludable. Se debe tener incorporado lo que son horas de sueño, alimentación, calidad de vida social y autocontrol”.
En ese sentido, destacó que “la energía vital no es la misma en los distintos ciclos de la vida, y hay que tener una capacidad de adaptación, tanto personal como de las personas que nos circundan. Es importante tener conciencia de que vamos haciendo cambios para lograr una rutina que sea saludable”.
Finalmente, Arteaga destacó que “la alimentación es crucial, se recomienda un régimen equilibrado con un alto contenido de agua. Debe contener elementos que van a nutrir las capacidades orgánicas de la persona, como lácteos, frutas y verduras. Con todos estos cuidados la persona mayor puede mantener su estado de lucidez”.
“A nivel cognitivo, existen recomendaciones, como mantener la interacción social y familiar. Fomentar la lectura de la persona mayor, realizar juegos de mesa, como sopas de letras, puzzles, manualidades, escuchar música o tocar algún instrumento y realzar actividad física de bajo impacto”, cerró.