Al no alcanzar el quórum necesario para su aprobación, de 68 votos, la Cámara de Diputados rechazó con 51 votos a favor, 33 en contra y 13 abstenciones, el informe de Comisión Mixta del proyecto que otorgaba exclusividad universitaria a las carreras de Kinesiología, Fonoaudiología, Enfermería, Obstetricia y Puericultura, Nutrición, Tecnología Médica y Terapia Ocupacional.
El diputado PS Juan Luis Castro, lamentó este resultado, planteando que “deja en una posición de indefensión respecto de todas las carreras de la salud que ahora podrían ser impartidas también por establecimientos no universitarios y, por lo tanto, sin la exclusividad y el rango que significa la formación de personas que están al cuidado de la salud de otros”.
“Yo creo que esto es un retroceso, aquí se produjo una situación inesperada pero que lejos de avanzar en materia de la calidad de la salud en Chile, se ha dado un paso atrás porque las carreras de la salud van a quedar en un plano donde, lamentablemente, no van a tener toda la experticia y toda la formación que quisiéramos”, advirtió.
El parlamentario anunció que solicitará al Ejecutivo presente un veto supresivo, para que se enmiende esta situación.”Esto está en manos del Gobierno, si el Gobierno evalúa esta decisión el envío de un veto presidencial podría ser la única salvación para los males que va a traer esta legislación con esta mayoría circunstancial”, señaló.
Castro sostuvo que “aquí hubo todo tipo de presiones. Me parece inexplicable que haya habido tantas abstenciones, que parlamentarios se hayan retirado de la sala, no cuadran lo números de todos los que estaban y los votos contados. No quiero pensar mal pero me parece extraño y sorpresivo que hayamos llegado a este punto que por una situación circunstancial no se haya aprobado el informe de la Comisión Mixta”.
La propuesta de la Comisión Mixta de diputados y senadores disponía que las universidades que impartieran esas carreras debían establecer planes y programas especiales para que los profesionales que hubieren obtenido su título en Institutos Profesionales reconocidos por el Estado, pudieran cursar en ellas y optar al grado de licenciado en dichas especialidades y al título correspondiente.
Asimismo, el texto legal precisaba que los Kinesiólogos, Fonoaudiólogos, Enfermeros, Matrones, Nutricionistas, Tecnólogos Médicos y Terapeutas Ocupacionales egresados y titulados en Institutos Profesionales y los estudiantes aspirantes a obtener los mismos títulos que, a la fecha de la publicación de esta ley, se encontraran cursando sus estudios en dichos Institutos, después de egresar y titularse en ellos, tengan los mismos derechos, estatus y calidades que aquellos profesionales que cursen sus estudios en universidades, excepto el grado de licenciado.
El proyecto se originó en una moción presentada en abril de 2005 por el senador Alberto Espina y la ex parlamentaria Evelyn Matthei. Fue aprobada en el Senado, pero en la Cámara los diputados rechazaron la exclusividad universitaria para la mayoría de las carreras, quedando sólo con esta calificación las carreras de enfermería y obstetricia.
Posteriormente, el Senado rechazó estas modificaciones de la Cámara, por lo que el proyecto de ley fue enviado a una Comisión Mixta. La propuesta fue aprobada por el Senado, pero con el rechazo de los diputados, no prosigue su tramitación en el Congreso.