El seleccionador nacional, el argentino Jorge Sampaoli, no quiso descartar enfáticamente que Arturo Vidal llegara en estado de ebriedad o no a la concentración del Complejo Juan Pinto Durán el martes en el mañana, asegurando que “no percibí” tal situación, en una rueda de prensa donde terminó visiblemente ofuscado.

En una masiva conferencia en el Complejo Fernando Riera, Sampaoli se refirió largamente a un nuevo acto de indisciplina que habría protagonizado Vidal, llegando cerca de las 8:00 de la mañana y en malas condiciones, según algunos trabajadores de Pinto Durán y de jugadores del propio plantel.

El DT casildense, de tranquilo semblante al inicio, relató que “Arturo llegó de su día libre, habló conmigo, que tenía algunos inconvenientes personales y pensé que si no estaba 100% no era conveniente que estuviera y lo liberamos”.

Consultado directamente si Vidal llegó en estado de ebriedad, dijo que “yo no percibí eso, tampoco se si hay jugadores que hablaron. No puedo hablar de supuestos. Estamos hablando sobre cosas en el aire”.

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Requerido para que descartar el incidente, el estratego trasandino no se quiso ser enfático: “Yo relató lo que pasó con Arturo Vidal conmigo dentro de Pinto Durán, fuera de Pinto Durán no puedo hablar de nada. Arturo se presentó en el horario que se tenía que presentar, me comunicó que tenía un inconveniente personal e inmediatamente pensé en el reemplazante. Todo lo otro no lo consumo ni me preocupa, si me preocupa que dentro del grupo haya divisiones que van a generar que dentro del funcionamiento del equipo no se vaya a ver lo que se vio en Copa América”.

En los momentos más complejos de la rueda de prensa, Sampaoli comenzó a molestarse cuando un periodista le apuntó que al cuatro jugadores (con audio grabado) revelaron a distintos medios que el jugador de Bayern Munich llegó en malas condiciones y durmió toda la mañana, para ser liberado pasado el mediodía de la convocatoria.

“La relación que usted tenga usted con los jugadores no es mi problema, pero sí es como usted me dice me parecería penoso, porque usted no es sicólogo ni alguien que me pueda ayudar al jugador”, disparó, mostrándose preocupado por las filtraciones del plantel.

Ya molesto, Sampaoli añadió que “yo cuento lo que viví. Me reuní con Arturo, me explicó que estaba con algunos inconvenientes personales que no le permitían estar y automáticamente determinamos la liberación”.

Sobre el control de los futbolistas a su ingreso a Pinto Durán, Sampaoli admitió que “yo no veo llegar a los jugadores, no estoy para eso. Yo estoy para los entrenamientos, estaba preparando una charla. Antes del entrenamiento hubo una charla, después del entrenamiento hubo otra charla, después estuvo el almuerzo, nosotros no estamos para abrirle el portón a los jugadores… me parece preocupante lo que me cuentan, porque si es verdad, cosa que desconozco, me parece riesgoso”

“No hago ningún control, respeto y creo mucho en el jugador, trato de respetarlo. Automáticamente, previo al entrenamiento hablamos con Arturo e hicimos la desconvocatoria”, sentenció.