La justicia francesa condenó el miércoles a 15 años de cárcel a una madre de 34 años que mató a su hija de casi tres años, metiéndola en una bolsa de plástico y tirándola luego a un río.
“Es un veredicto de comprensión”, estimó el abogado de esta madre, Estelle Derieux, quien mató a su hija Mandolina en 2013. “Estelle Derieux acepta la pena (…) y entiende que la sociedad la sanciona”, agregó Vincent Demory.
El fiscal Luc Fremiot había recalcado la “alteración parcial de discernimiento” de la acusada, la cual afirmó que había matado a su hija porque temía que los servicios sociales se la sacaran.
“Hay expedientes que querríamos no tener que abrir nunca, expedientes que tendrían que permanecer en el dominio de las pesadillas”, según Fremiot.
La acusada, que por momentos permanecía impasible y por momentos sollozaba, dijo que no había entendido que los servicios sociales la querían ayudar. “Pido disculpas ante ustedes”, declaró ante la corte.