La ministra del caso Matute, Carola Rivas, planteó una nueva hipótesis por la muerte de Jorge Matute Johns, al preguntarle por los hallazgo de barbitúrico en sus restos de Jorge Matute Johns. No fue todo: también criticó duramente el trabajo que realizaron las policías en los inicios del caso.

A casi 16 años, la magistrada cree que el universitario ingirió el pentobarbital en cápsulas, según consigna El Mercurio. “A partir de la investigación y de los profesionales que nos asesoraron, descubrimos una forma oral, a través de cápsulas, que podía alcanzar los mismos niveles (altas concentraciones de toxicidad) que la vía endovenosa o intramuscular”, explicó Rivas.

Esta hipótesis sería más posible, ya que “nadie se imagina que alguien ande con una jeringa en una discoteca haciendo dormir a la gente”, agregó. Cómo aún no se acredita cómo llegó esta droga hasta su sistema, aún no tiene un delito configurado, pero el suicidio fue completamente descartado, ya que su cuerpo apareció a kilómetros de la discoteca La Cucaracha, en la ribera del río Bío Bío en camino a Santa Juana.

TVN
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“Seguimos trabajando en las posibilidades de la ingesta bajo engaño, con una intención de hacerle daño, de matarlo, con una intención de incluso cometer algún atentado sexual contra él o (que lo haya ingerido) sin conocer los efectos. En ese sentido, no tenemos la respuesta hoy día”, afirma.

Rivas tiene sus sospechosos y las primeras declaraciones en la causa han sido claves: “Le hemos puesto atención a todos los que parecieron esenciales en las primeras horas de la desaparición. Entre ellos hemos vuelto a analizar los relatos de Gerardo Roa, de las hermanas Maldonado -con quienes Coke llegó a La Cucaracha-, relatos de la gente de la discoteca, y nos hemos encontrado en varios de estos relatos en situaciones no solo contradictorias, sino que situaciones, de hecho, imposibles”, afirma.

Victor Salazar | Agencia UNO
Victor Salazar | Agencia UNO

Además, la ministra criticó duramente el trabajo de las policías de la época, ya que muchos testimonios pudieron ser falsos o manipulados por los oficiales de Carabineros o la Policía de Investigaciones que los recogieron. Según Rivas, la calidad de los investigadores que participaron en las diligencias iniciales “es de una incompetencia vergonzosa”, subrayó.

Los errores se concentraron sobre todo en Carabineros, ya que carecían de las capacidades para investigar. “Los relatos que tomaron a personas muy importantes están manipulados y siguieron siendo manipulados en orden a hechos que ellos querían establecer”, indicó.

Como la primera jueza a cargo del caso, Flora Sepúlveda, pidió a Carabineros y PDI investigar en paralelo, “ambas policías corren como si ésta fuera una carrera de quién llega primero”, con “codazos” y “zancadillas” que llevan al “desastre increíble” de las primeras diligencias.