Un grave caso de bullying escolar se registró en el curso séptimo básico del Liceo San José de Punta Arenas.

Dos alumnos sufrieron amenazas, por lo que sus familias pusieron recursos en la Superintendencia de Educación y Tribunales.

En conversación con el medio local El Pingüino, la madre de uno de los menores de edad afectados dio a conocer su caso.

“Mi hijo empezó con bullying desde comienzo de año. Al principio no teníamos nombres, porque él no conocía a todos sus compañeros. Le rayaban la mesa, le decían cosas, pero no sabía quién era”, dijo.

“Pero ahora, a fines de año, la mamá de este otro niño me envió un mensaje. Me dice que hay un grupo de WhatsApp donde estaban molestándose, donde el que amenaza decía que le hagan algo a mi hijo”, agregó.

Luego, reveló el preocupante mensaje. “Decía que ‘ojalá se muera, que lo descuarticen, lo quemen y lo violen'”.

La mujer no quedó conforme con la respuesta del establecimiento. “Todo lo que este niño le estaba haciendo a mi hijo era grave y ameritaba la expulsión inmediata”, aseguró.

“El agresor directo confesó el tema. Estaba arrepentido, pero solamente lo dejaron con condicionalidad, que si el próximo año se porta mal o se porta más grave aún, lo expulsan”, concluyó.

Sobre la posibilidad de cambiar a su hijo de establecimiento, dijo: “No hay cupos en ningún colegio, entonces tampoco se puede”.