Este martes, se confirmó que el cuerpo encontrado en los roqueríos de Viña del Mar el fin de semana, correspondía a Anahí Espíndola, la joven que desapareció a inicios de enero tras asistir al gimnasio.

Fue el jueves 4 de enero cuando se vio por última vez con vida a la joven de 22 años, una vez que terminó de entrenar en el centro deportivo Seven de la comuna, a eso de las 23:00 horas.

Posteriormente, no se tuvieron antecedentes de su paradero, lo que hizo que se comenzara una intensa búsqueda por sus familiares y seres queridos.

En ese contexto, se revelaron una serie de registros con el trayecto que hizo Anahí Espíndola tras salir del recinto, donde se veía caminando por la vía pública.

Asimismo, una imagen alertó a los cercanos de la joven, pues aparecía corriendo por una de las calles de la ciudad jardín, además de otro video en el que apareció aparentemente acompañada de una misteriosa mujer.

Anahí Espíndola: una búsqueda con final lamentable

En medio de la búsqueda, el tío de la joven, Ernesto Córdova, comentó a Mega que “algo le tuvo que haber sucedido. Es terrible la situación que estamos pasando como familia. No se lo doy a nadie este dolor que tenemos”.

“Ella es una chica extraordinaria, se comporta muy bien, trabajaba en el mall de Viña y le ayudaba a mi padre con el arriendo del departamento. Nos encontramos muy consternados, estamos súper mal, necesitamos de su ayuda”, agregó.

A su vez, el abuelo de Anahí Espíndola señaló a Alerta Noticias Valparaíso, que “hay una persona que vende productos en la zona y que dijo que había visto a una niña caminando por el sector de la playa, en la noche, más menos a la hora en que se produce la desaparición de ella”.

Cabe precisar, que la Fiscal del caso señaló que por ahora no descartan la participación de terceras personas, mientras el caso se mantiene en reserva.