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Kika Silva impactó en la Gala de Viña vistiendo el icónico vestido de Jennifer López del 2000, pesando 285 gramos y siendo uno de los tres originales en el mundo. Sorprendió al aparecer sola sin su esposo Gonzalo Valenzuela, explicando que quería destacar su individualidad. Agradeció el apoyo en redes sociales y destacó el trabajo en equipo detrás de su éxito en el desfile de Enjoy.
Kika Silva deslumbró la noche del viernes desfilando por la alfombra roja de la Gala de Viña con el mítico vestido que usó Jennifer López en los Grammy del 2000.
El atuendo de seda verde pesaba 285 gramos, y es uno de los tres originales que existen en todo el mundo.
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Sin embargo, algo que llamó la atención de los televidentes fue que pasó sin la compañía de su marido, el actor Gonzalo Valenzuela.
En conversación con Página 7, luego de su presentación en el desfile de Enjoy, de la nueva colección de Flores, la modelo explicó la razón.
"Estoy casada, pero eso no me hace ser siempre la mujer de... Mi trabajo es mi trabajo", comentó.
"Él está siempre acompañándome, estaba conmigo en la Gala". Finalmente, sostuvo que quería guardar ese momento para ella.
En cuanto a su paso por la Gala de Viña, Kika Silva comentó que, debido a las actividades de los últimos días, no ha podido ver todos los comentarios positivos que recibió en redes sociales, pero estaba muy contenta.
"Lo que ustedes pudieron ver como resultado es gracias a un equipo grande que hay detrás, no lo hubiese podido lograr sin ellos y logramos lo que parecía imposible", manifestó.