
Más de 50 sucursales de Starbucks en Chile cerraron debido a una huelga de 1.200 trabajadores por salarios bajos, alegando que pagan $2.800 la hora. El sindicato señaló que esto equivale a la mitad del precio de un frappuccino grande. La empresa afirmó haber alcanzado acuerdos, pero los empleados pedían un aumento salarial del 200%, considerado insostenible a largo plazo. Starbucks busca diálogo para resolver la situación y destacó la importancia de mantener el negocio y empleos en el país.
Desde este lunes, más de 50 sucursales de Starbucks en Chile cerraron sus puertas temporalmente a público debido a una huelga iniciada por 1.200 trabajadores afiliados al sindicato.
El gremio denunció que la empresa paga $2.800 a los baristas por hora, lo que equivale a la mitad del precio de las variedades de café que comercializan.
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En esa línea, desde el sindicato ilustraron como ejemplo que un frappuccino grande cuesta $5.700, mientras que un barista gana $2.800 por hora trabajada.
Por su parte, la empresa multinacional afirmó en un comunicado que, si bien se habían alcanzado ciertos acuerdos, una de las exigencias principales de los trabajadores era un aumento salarial del 200%.
Según plantearon desde Starbucks, esta demanda excede lo sostenible para el negocio a largo plazo.
Frente a esto, Starbucks afirmó que seguirá buscando instancias de diálogo para lograr consensos y acuerdos responsables. La empresa enfatizó la importancia de mantener la continuidad del negocio y las fuentes de empleo que genera en el país.
Al menos hasta la tarde noche de este lunes, más de 50 sucursales a lo largo del país se mantuvieron cerradas, con algunas con manifestaciones de los trabajadores en los frontis.
Eso sí, el resto de sucursales de Starbucks que abrieron de igual forma lo hicieron con una notable baja de personal.