Alfonso Concha, periodista de Canal 13, recordó con humor sus looks de juventud en T13 Finde, durante una divertida conversación con Álvaro Paci.

Entre risas, Concha revivió fotos de sus años universitarios, incluyendo una imagen del 2000 donde lucía dreadlocks, un estilo que adoptó por su cabello crespo.

“Yo trataba (de peinarme), pero al final me aburrí y se comenzó a formar uno, otro y al final (...) yo feliz”, contó.

En otro momento, Paci mostró una foto de Alfonso Concha aún más joven, donde, entre risas, el periodista confesó que “estaba luchando por la paz en el mundo”, en tono de broma.

También compartió una imagen de 1992, cuando participó en un campeonato de natación, y explicó que su cabello rapado era parte de una tradición deportiva.

“Estoy pelado así, porque el origen de todo esto tiene que ver con un rito, y es que uno participaba en el primer nacional y te pelaban, te mechoneaban”, relató.

El momento mostró el lado más relajado y auténtico de Alfonso Concha, quien próximamente debutará con su programa La Tarde es Nuestra en Canal 13.

La noche del sábado, en Hay que decirlo Prime, Willy Sabor fue a la casa de Iván Arenas, para mostrar las colecciones que el humorista ha juntado a lo largo de los años.

"De cabro chico que era bueno para juntar cuestiones", explicó el Profesor Rossa al mostrar su hogar en Rapel.

Al entrar, Arenas tiene una colección de espadas e incluso la armadura de metal de un caballero medieval.

La casa era un verdadero museo, con artículos de todas partes del mundo.

Platos, cámaras de fotografía de distintas épocas, cerraduras, planchas y vinilos eran algunas de sus colecciones.

En una pared enseñó su inmensa colección de cucharillas: "El entusiasmo es eso, partir con dos, tres, cuatro, las encuentras bonitas, porque no es una típica cuchara, sino que es la que tiene adornos, relieves".

A otro lugar de su casa, Iván Arenas lo llamó "el pasillo del tiempo". Iván Arenas explicó que "aquí tengo relojes y despertadores. Yo voy haciendo formas al ordenar, me fijo en una línea central, viendo los solos, los que se parecen y así se va armando".

En cuanto a los teléfonos, explicó que tiene un par que "son especiales para mí, porque son de Vietnam, de la época de la guerra".

En el patio, tenía su colección de destapadores, una bomba de gasolinera antigua, una silla de dentista y otra de peluquero.

Hace más de una década, Los Wachiturros llegaron a la escena musical con sus videos virales, llamativas coreografías y peculiares looks.

Aunque disfrutaron de una fama breve entre 2011 y 2013, la agrupación se disolvió recién en 2019, y actualmente, algunos exintegrantes aún realizan presentaciones.

Una de sus marcas distintivas sigue vigente: su forma de vestir. Sin embargo, este rasgo también los llevó a protagonizar una de sus mayores polémicas, vinculada a la reconocida firma Lacoste.

Durante su apogeo, los artistas popularizaron el uso de prendas de la marca francesa. Esta situación no agradó a la marca de lujo, que decidió intervenir para "cuidar su imagen", provocando una controversia internacional.

La compañía envió a los integrantes una carta documento exigiendo que dejaran de usar la ropa del "cocodrilo".

En una reciente entrevista con RMG, Simón Gaete, uno de los vocalistas originales, confirmó la existencia de este insólito acuerdo. Además, explicó que continúa recibiendo pagos anuales a cambio de no vestir más la marca.

"Recibimos una carta documento de una empresa que representa a Lacoste. Nos mandaron una intimación que prácticamente decía que el uso nuestro de su indumentaria era una mala imagen para la marca y que estaban dispuestos a pagarnos una suma de dinero por la eternidad", comentó.

El acuerdo de Lacoste y Los Wachiturros sigue vigente

Esa promesa se cumplió, ya que hasta el día de hoy "no la puedo usar porque sigo cobrando. Son 800 euros (cerca de $850 mil CLP por año). Antes la cobraba mi mánager y después cuando me hice mayor de edad hice el papeleo para cobrar yo".

A pesar de las críticas que acusaron discriminación, Gaete aclaró que no se sintió ofendido: "Yo no lo tomé mal. Ponte a pensar que una marca internacional está prestando atención a lo que haces".

"Y bueno, ellos son los dueños. Te dicen que no lo hagas y encima te pagan. Yo firmé primero, por eso a mí me pagan esa cantidad", cerró.