María Branyas Morera, quien falleció a los 117 años en agosto de 2024, fue un caso único de longevidad y salud.
Nacida en 1907 en Estados Unidos y residente en Cataluña, Branyas vivió varias crisis globales, incluyendo dos guerras mundiales y la guerra civil española.
Además, enfrentó dos pandemias y se mantuvo lúcida y activa hasta sus últimos días.
¿Qué la hizo tan longeva? Según BioBioChile, un estudio exhaustivo realizado por el genetista Manel Esteller, reveló que su ADN contenía genes protectores contra enfermedades cardíacas y cáncer.
Asimismo, su microbiota intestinal mostraba características propias de un bebé.
En tanto, su metabolismo era altamente eficiente, con niveles bajos de colesterol “malo” y altos de colesterol “bueno”, lo que contribuyó a su excelente salud durante toda su vida.
“Nuestra supercentenaria mostraba una edad biológica mucho más joven que su edad cronológica real y esto ocurría en los tres tejidos diferentes analizados”, explicaron desde la investigación liderada por el genetista Manel Esteller.
Por otro lado, su estilo de vida saludable, que incluía una dieta mediterránea, tres yogures diarios, caminatas regulares, y evitar el alcohol y el tabaco, fue clave para su longevidad.
También, mantenía una vida social activa, rodeada de su familia, que incluía tres hijos y numerosos nietos y bisnietos.