Teresa Marinovic goza de ser una de las mujeres que más ronchas sacan en redes sociales, producto de sus opiniones en distintas materias de corte social y políticos.
La licenciada en filosofía y directora ejecutiva de Fundación Nueva Mente, estuvo este miércoles invitada al panel de Bienvenidos junto con los cientistas políticos Patricio Navia y Genaro Arriagada, para analizar desde sus puntos de vista el estallido social.
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Pero fiel a su personalidad, el diagnóstico de Marinovic fue bastante crítico, asegurando que Carabineros de Chile estaban prácticamente de manos amarradas ante los saqueos y la destrucción de infraestructura pública y privada.
Por lo anterior, aseguró respecto a las manifestaciones, que éstas debieron haber sido frenadas desde los primeros desórdenes por parte del Gobierno, y no promover las marchas, sabiendo que terminarían en actos vandálicos.
Asimismo, agregó que si bien hay que aislar a las personas que cometen actos delictuales, lo primero es apoyar el actuar de Carabineros y no darle “credibilidad absoluta a un informe (de Human Rights Watch) que yo no puedo negársela ni dársela, pero es un informe que se hizo en 20 días, oyendo solo una parte, y por lo tanto para mí no tiene un carácter de un dogma. No estoy diciendo que sea falso, no lo sé, pero no le daría la condición de dogma y de verdad oficial como se la dan muchos”.
Fue tras estas palabras que se vislumbraron las primeras diferencias con el animador Sergio Lagos presente en el estudio, quien tras sus palabras replicó con un “Qué duro“, antes de pasar a un móvil desde La Serena.
Al regreso, Marinovic continuó exponiendo su punto, señalando que en estos momentos “la solidaridad y la empatía, que generalmente la mayoría de seres humanos expresan, no sirve de nada o sirve de poco“. En ese momento fue interrumpida por un Sergio sorprendido que le pregunta “chuta ¿pero cómo no va a servir para nada?“.
Tras su intervención, tanto Marinovic como Navia coincidieron en que había que pasar de eso, tanto que este último indicó que ninguno de esos dos conceptos iban a parar el próximo incendio. A lo anterior, la comentarista agregó: “Cuando tú tienes espacios televisivos o en los medios de comunicación, es importante salir de la empatía, partir de la empatía evidentemente pero salir de ahí para llegar a una solución concreta“.
Descargo de Sergio Lagos
El animador no aguantó muchos segundos en silencio y pidió permiso para intervenir y aportar, desde su mirada, con una visión bastante más mesurada y dialogante.
Lagos expresó que un buen gesto político sería “abrir una mesa de diálogo mucho más amplia de la que ha existido hasta el minuto y hacer sentir parte a todas las fuerzas sociales”, alcanzó a decir antes de ser interrumpido por Navia quien le aseguró que “los que saquean no tienen ningún interés en entrar a esa mesa”.
Sergio continuó indicando que quizá esa mesa de negociación social podría hacer un llamado público a detener la violencia, sin embargo, fue refutado nuevamente por Navia, a lo que el animador de Sigamos de Largo simplemente agregó: “Perdón pero yo por principios no puedo pensar que la única solución posible a este conflicto que tenemos es la incorporación de las Fuerzas Armadas una vez más en la calle“.
Luego de conversar otras aristas del estallido social, Lagos tomó nuevamente la palabra para expresar lo delicado que era dar a entender que estamos muy cerca de pedir nuevamente la llegada de las fuerzas de orden a la calle. Asimismo, tomó como ejemplo la crisis vivida en Ecuador, donde autoridades de gobierno se reunieron en un mesa muy grande de conversación, con distintos actores sociales, y que sí calmaron los ánimos, algo que en Chile aún no pasa.
Una vez más, Marinovic con tono irónico le pregunta “¿lo tuyo es una metáfora o es en serio?“, a lo que el conductor le dice “estoy contando los hechos recientes de un país que no está tan distante a nuestra realidad, que logró un acuerdo, que logró detener los niveles de violencia que también estaban haciendo temblar la democracia en ese país“.
“Yo creo que las instancias democráticas en nuestro entorno aun existen, yo no puedo dejar correr la irracionalidad libremente (…) Por lo mismo, cuando hablan tan rápidamente acerca de la incorporación de los militares a la calle, me viene la sensación de que ya es mejor bajar los brazos y que se acabó el juego político”, sentenció.
