Este domingo se emitió la esperada final de El Discípulo del Chef donde Miel Blanca se coronó como la ganadora absoluta de la temporada, tras vencer a Joaquín y Nicole del equipo azul y rojo, respectivamente.
La competencia fue dura, pues primero los seis concursantes debieron preparar un menú navideño completo y luego los tres que pasaron a la última instancia, debieron crear otro menú original para un selecto grupo de chefs.
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Y una de las que quedó en el camino fue Michelle Lacoste, quien junto a Joaquín Winter, fueron los dos finalistas seleccionados por Yann Yvin. Si bien fue Winter quien avanzó a la gran final, el francés destacó la impecable labor de Lacoste.
Pese a lo anterior, los televidentes nunca lograron conectar realmente con la participante, pues era dueña de un fuerte carácter que la llevó a tener varios encontrones con sus colegas, incluyendo tratos bastante cuestionables. Además, fue acusada de hacer trampa en una ocasión y, en esta final, también trabajó en uno de sus platos fuera de tiempo.
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Tras emitida la final del espacio, Michelle utilizó su cuenta de Instagram para expresar su sentir respecto a lo que vivió. “Agotadores cuatro meses, sin duda los más difíciles de mi vida. No por un tema profesional sino por todo lo que viví. Una crisis social, económica y política que nunca antes había vivido. Una pena que inundaba el alma, pero el show de TV seguía”, partió diciendo.
Luego, reveló que lo pasó bastante mal durante los primeros días del estallido social, tanto que incluso a veces no tenía qué comer. “Días sin tener ni 100 pesos para un pan. Días largos en que empezaba a las 7:00 horas en la Vega comprando limones, me iba al canal y después corría a venderlos a las marchas, comiéndome mil lacrimógenas, ayudando a compañeros caídos, pidiendo a gritos paz”, agregó la exconcursante.
En este tiempo, Lacoste se quedó sin trabajo y sin eventos, solo con el programa de CHV, cuyo formato, según dijo, la “incomodaba mucho”. También contó que perdió uno de sus mayores sueños, que era asistir a una final mundial en París. “Creo que ahí empezó mi dolor, mi rabia, mi frustración, mi duelo, mi corazón se partió. Desde ahí la vida cambió aún más“, aseguró.
“Quiero por sobre todo agradecer a toda la gente que siempre estuvo conmigo, mis hijas, gente que conocí por esta red dándome apoyo, mandándole saludos a mis niñas, gente que me mandaba lindas palabras, regalos, marcas nuevas, mis marcas, mis amigos, compañeros de mis hijas, gente en la calle, hasta carabineros”, explicó.
Por último, también valoro a todas las mujeres que la apoyaron y escribieron mensajes por interno contándoles duras historias de vida, indicando que estaba con ellas y que las llevará siempre en su vida y corazón.
“De todo este proceso lo más especial han sido todas las historias que he recibido de mujeres. No sé que irradiaré pero me sorprendí de tantas historias abusivas, golpes, abusos sexuales, manipulaciones… lloré con muchas lecturas y no dejo de pensar en ustedes, mujeres luchadoras (…) Las amo y las llevaré siempre en mi vida y corazón, y sé que algo sucederá”, escribió.
Su mensaje sumó decenas de comentarios de apoyo y más de 170 ‘me gusta’.