A fines de diciembre, Canal 13 anunció que estaba preparando la versión chilena de Bailando por un Sueño, programa que estará a cargo de Martín Cárcamo. A partir de ahí comenzaron a surgir los nombres de los participantes, que competirán representando a organizaciones benéficas.
Una de ellas es Maura Rivera, quien reveló que inicialmente estaba contemplado que ella participara como bailarina de su esposo, Mark González, aunque este último descartó ser parte del programa.
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“Mark no aceptó porque su carrera va enfocada por el lado del deporte y a mí me ofrecieron quedarme. Me encanta este tipo de programas y formato: lo paso bien, es entretenido, es baile y amo bailar. Me pareció súper choro después de tantos años volver a competir. Y lo más importante es que existe un fin, que es ayudar y eso me parece genial”, sostuvo en conversación con Página 7.
Respecto a los competidores que tendrá que enfrentar sobre el escenario, la excoach de Rojo confesó conocer a la mayoría y destacó la versatilidad que existe en el grupo. ¿Algún rival a vencer de los 15 confirmados que existen hasta el momento?
“No me atrevo a dar nombres ahora, porque todos tienen experiencia televisiva, y recordemos que esto es un programa de TV. En cuanto al baile, tendría que verlos en el escenario, ahora no podría dar un veredicto de quien podría ser el mas fuerte, ya que también existen otras cosas que priman, como el cariño del público”, manifestó Maura.
Sobre la condición a la que llega al estelar, que arranca en marzo, Rivera señaló que tras su paso por Rojo, dejó de bailar por un período de seis meses, pero aseguró que “el cuerpo tiene memoria. Los ensayos durante febrero ayudan a recuperar el training, que se pierde un poco. Todavía me falta, porque creo que puedo dar mucho más”, advirtió la excocotera.
“Se me va a exigir mucho más”
Una vez que Maura fue confirmada como participante de Bailando por un Sueño, salieron algunas voces señalando una suerte de “injusticia”, ya que ella es bailarina y el resto de los concursantes provenía de otros ámbitos. Ella no elude el tema.
“A mí se me va a exigir mucho más, lógico. Desde ya se me exige más en los ensayos y es súper válido que se me exija más que el resto, porque toda mi vida he bailado. He participado en programas de baile, en competencias y en musicales. Me van a exigir más y están en todo su derecho. Yo lo haré lo mejor posible”, aseveró la mujer que representará a la fundación Minga Valpo.
“Es entendible que sientan que tengo más ventaja, pero creo que acá la ventaja no va en que si yo he bailado más o menos que el resto. También hay gente que se puede superar y que puede crecer mucho“, lanzó.
Por último, tuvo palabras para quien será su pareja: Francisco Chávez, exbailarín del staff de Rojo. “Es mi mejor amigo y nos conocemos harto. Nos entendemos, nos reímos y lo pasamos genial y eso es lo importante. Me da seguridad, apoyo y estoy feliz con él“, cerró.