“Estamos retirados de las luces”, dice con humor Carlos Rojas. Y es que si bien este hombre de 71 años lleva una vida tranquila en la actualidad, a mediados de los 2000 tuvo su ‘minuto de fama’ en televisión.
Solo basta hacer memoria y recordar cualquier capítulo de El Último Pasajero, programa de TVN, en donde tres cursos de enseñanza media competían para ganarse una gira de estudios, con todos los gastos pagados.
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Allí ‘Don Carlos’ cumplía una breve, pero importante misión: echar a andar el bus que llevaría a los adolescentes a su anhelado viaje. Era el momento más tenso del espacio conducido por Martín Cárcamo.
“Como yo no tenía costumbre de estar en TV, por supuesto que me entraban los nervios al principio, sobre todo cuando venía el anuncio del conductor. Pero con el trajín, se me fue olvidando un poco”, rememora el querido don Carlos junto a Página 7.
¿Cómo llegó al programa? Él explica que “los buses (de la empresa Vivipra) tenían que ir con un conductor, porque la prestación de servicio era así. Había varios postulantes y por algún motivo que desconozco me eligieron a mí“, dice con total sinceridad.
“Fue una bonita experiencia. Jamás pensé en llegar a la televisión y gracias a la empresa tuve esa oportunidad”, agrega el hombre que recuerda algunas anécdotas vividas en el espacio de entretención de la señal estatal.
“Recuerdo que no se encontró hasta el último la llave. Hubo mucha tensión ahí”, dice entre risas, añadiendo la reacción que tuvo su familia y sus compañeros de trabajo ante su inesperada fama en aquella época.
“Mi familia estaba contenta porque aparecía en la televisión y en la empresa mis compañeros también me echaban bromas con el cuento de que era todo un artista de cine“, manifiesta el hombre que solía aparecer con sus lentes oscuros al volante.
Carlos Rojas compartió durante 4 años con Martín Cárcamo de quien guarda el mejor de los recuerdos. Y es mutuo. Consultado por nuestro medio, el animador también tuvo cariñosas palabras para el ‘tío conductor’ de El Último Pasajero.
“Tengo recuerdos extraordinarios. Él es un caballero, una persona que sin ser de la televisión, aprendió muy rápido los tiempos de la tele. Le ponía la tensión justa, en el momento adecuado”, expresó Cárcamo a nuestro medio.
“Además, la gracia que tenía don Carlos es que se dedicaba a eso, a conducir buses. Tengo muy buenos recuerdos de él, un tipo encantador y un gran profesional”, cerró Martín.
Tranquilo presente
Don Carlos cuenta que cuando comenzó la pandemia de COVID-19 se retiró de la empresa, para la cual trabajó por más de 20 años, pero ahora volvió para hacer un reemplazo.
“Estoy retomando, hay un compañero que está con licencia”, cuenta, indicando que no sabe exactamente por cuánto tiempo será. Lo que sí sabe, es que afortunadamente no ha tenido mayores inconvenientes con el coronavirus.
“No me ha tocado nada, porque he estado en la casa y he salido muy poco. No he tenido mayores problemas. Llevo una rutina familiar bien normal”, relata el hombre que actualmente vive con su familia en la comuna de Estación Central.
El recordado chofer del programa de concursos de TVN dice que la gente “hoy no me reconoce tanto. Solo el gremio de buses, ellos más o menos me reconocen“, algo que contrastaba con sus primeros años al dejar las cámaras.
“Antiguamente cuando estaba en el programa sí. Eran muestras de cariño. Yo nunca he sido popular, no estoy acostumbrado a que me miren tanto o que me saluden por todos lados”, sentencia sobre su experiencia en el programa.
