La mañana de este lunes, la parlamentaria Karol Cariola y la exdiputada María José Hoffmann estuvieron en el matinal Tu Día hablando sobre el posible futuro de la nueva Constitución, que será votada de manera obligatoria el próximo 4 de septiembre.
En ese contexto, el periodista Rodrigo Pérez salió a la calle a conversar con la gente sobre sus impresiones respecto al proceso y los futuros cambios que podrían venir para el país. Y fue entonces que irrumpió Marisol con un fuerte mensaje para el panel.
“En ese país algunas mujeres somos desvaloradas. No tenemos las mismas opciones que los hombres. Ustedes que son del gobierno deberían ayudarnos a que seamos más valoradas y tengamos los mismos sueldos”, indicó inicialmente.
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La mujer comentó que ha criado a dos hijas, luchando toda la vida por darles lo mejor. De hecho, su hija mayor está preparando su examen de grado para ser abogada, mientras la otra está a un año de convertirse en educadora de párvulos.
“Estoy feliz de que este gobierno tenga más mujeres, que sean una representación importante. He sacado adelante a mis niñas y creo que las mujeres en Chile tenemos mucho empuje y somos capaces de salir adelante, así que sigamos”, dijo.
En ese punto, Ángeles Araya interrumpió desde el estudio: “Pero Marisol es súper joven, y con hijos tan grandes”, apuntó.
“No creas. No soy tan joven. Tengo mi edad; es que me baño en leche, como Cleopatra“, bromeó en el despacho, sacando carcajadas en el programa matutino.
La entrevistada que sacó risas en Tu Día
“Las mujeres en Chile somos valientes, tenemos pachorra y somos guerreras. Tengo claro que vamos a llegar lejos, pero debemos tener la ayuda del gobierno, y de los senadores y diputados“, añadió Marisol.
“¿Por qué un hombre gana más que una mujer? Gracias a Dios mis hijas tienen un papá que paga la pensión todos los meses, pero igual con dos niñas en la universidad, yo tengo que trabajar más”, explicó también la mujer en el despacho en vivo.
“Si yo fuera valorada como un hombre, podría trabajar menos y ganar el mismo dinero”, lamentó.
“Luchen por nosotras, por nuestro género, porque somos capaces y somos guerreras”, concluyó antes de despedirse, porque tenía que irse a trabajar.
