El año 2019, el GAM presentó la obra Mistral, Gabriela (1945), protagonizada por Solange Lackington. La idea era mostrar a la ganadora del Premio Nobel justo en el momento en que se entera de que recibirá ese reconocimiento. Para ello, la actriz pasó por un largo proceso de caracterización, y todo eso lo abordará este miércoles en un montaje especial por el Día Internacional de la Mujer.
“El director artístico residente del Teatro Nescafé de las Artes creyó que era una muy bonita excusa hablar de mi proceso creativo y artístico de ese primer montaje para hablar de Mistral, y qué mejor que en una fecha tan emblemática como el 8 de marzo“, explicó la intérprete a Página 7.
De cómo me convertí en Mistral es, entonces, la teatralización de un suceso real, y se presenta esta jornada a las 20 horas, con una función única.
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“Ese suceso real es mi proceso de camarín, es como abrir ese espacio y contar lo que viví construyendo el personaje. Tengo un trabajo previo que se devela al público para interpelarlo, a ellos y a las artistas musicales que trabajarán conmigo”, dijo Lackington.
Se trata de la soprano Ingrid Leyton y la guitarrista clásica Lorena Souper, quienes acompañan a Solange en el escenario para “mostrar lo que fue realmente Gabriela Mistral, dentro de lo que el tiempo nos permite. No es posible abordar todo su legado, pero sí reflexionar un poco sobre ella“.
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El camino de Solange Lackington para convertirse en Gabriela Mistral
Mistral, Gabriela (1945) se estrenó en mayo de 2019 con una temporada muy exitosa en el GAM. Posteriormente, fueron programando giras por Chile, pero estalló la pandemia y los planes se desmoronaron, justo cuando el equipo tenía una invitación para presentarse en Estocolmo.
De a poco, con restricción de aforos, fueron volviendo en algunas salas, pero este mes regresan en gloria y majestad con una temporada de un mes en el Teatro de la Universidad Católica. Las funciones irán del 15 de marzo al 15 de abril.
“Ahora, sin pandemia ni restricciones en las salas, es muy gratificante retomarla, porque es una obra preciosa y un trabajo que nos encanta hacer. Ojalá la pudiéramos seguir dando muchísimas veces y en distintos escenarios”, dijo Solange Lackington.
La actriz contó que, cuando hicieron el primer montaje, estudió mucho sobre Gabriela Mistral. “Con mucha vergüenza, reconozco que yo tenía un conocimiento muy vago de ella, pero es el caso de mucha gente”, confesó.
“Para este bio-drama (del 8M), nuevamente revisamos material, y uno no termina nunca de descubrir cosas de ella. Claramente, sabía que fue una precursora del voto femenino, y abogaba por las mujeres, los niños, los pobres y los más necesitados“, destacó.
Día Internacional de la Mujer: la conexión de la escritora con el 8M
Para Solange, hacer la obra De cómo me convertí en Mistral en el Día de la Mujer “no es una casualidad, sino una causalidad”.
“El 8 de marzo se conmemora a las mujeres a raíz de uno de los hitos más fundamentales de la historia, que fue el accidente en Nueva York donde murieron más de 120 trabajadoras calcinadas”, recordó la actriz.
“Dos años antes de que ese hecho ocurriera, justamente el 8 de marzo de 1906, aparece publicado en La voz el Elqui ‘La instrucción de la mujer’, un texto firmado por Lucila Godoy Alcayaga. Eso habla de las inquietudes que la rondaban desde temprana edad, y su vocación pedagógica e instructora”, añadió.
Este singular artículo reveló en su momento una honda preocupación por el tema de la educación de la mujer y su importancia como factor de desarrollo en la sociedad. La autora -entonces adolescente- quería que sus congéneres pudieran “llegar a valerse por sí solas y dejen de ser aquella creatura que agoniza y miseria (sic) si el padre, el esposo o el hijo no le amparan. ¡Más porvenir para la mujer, más ayuda!”.
Para Solange, Gabriela Mistral “escribió este instructivo para que existan menos mujeres damnificadas y afectadas por el patriarcado, y es muy bonito e interesante que la gente sepa que Mistral es mucho más que una poetisa y una maestra rural que ganó el Novel de Literatura. Es una mujer que fue una adelantada y una visionaria para su época en términos de todo lo que avistó antes que iba a pasar, siempre apuntando a las mujeres y los niños”.
Por lo mismo, “es importante hacer este bio-drama y la temporada de la obra, porque aportamos un poquito a dejar de estar al debe con ella como sociedad”, cerró Lackington.
