El lunes 15 de mayo, con el reestreno de la teleserie Amar Profundo, la programación de la tarde en Mega quedó totalmente diferente. La Hora de Jugar se adelantó, dejando fuera de esa franja a la producción brasileña Corazón de Madre.
Esta semana, la apuesta comenzó a emitirse en el horario de trasnoche, después de la una de la mañana.
Recordemos que el prime está a cargo de Hijos del Desierto -ya en su recta final- y la turca Yargi.
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Posteriormente, el canal repite el capítulo de Como la vida misma, para luego dar paso a dos apuestas cariocas: Corazón de Madre y Corran por sus vidas.
Esta semana, la teleserie protagonizada por Lurdes, Victoria y Thelma vivió dos grandes tragedias: la pérdida del embarazo de Camila y la muerte de Binicio, el hijo de Raúl y Lidia.
La triste pérdida de Camila en Corazón de Madre
Durante la noche, mientras dormía, Camila sintió una fuerte punzada de dolor y descubrió con pánico que estaba sangrando.
Danilo la llevó a urgencias y junto a Lurdes esperaron que saliera de la sala de operaciones. Sin embargo, la doctora no llegó con buenas noticias.
La situación de la joven profesora se complicó y, para salvarle la vida, no solo murió su bebé en camino, sino que además tuvieron que sacarle el útero, quitándole las posibilidades de ser mamá en el futuro.
“Mamá, solo tengo 24 años. ¿No había otra forma? ¿Cómo puede ser? Yo ni pensaba ser madre hasta que Thelma pinchó los condones y me embaracé. Pero ahora no parece tener sentido mi vida si no soy madre“, le dijo Camila a Lurdes entre lágrimas cuando despertó en Cuidados Intensivos.
“Tú serás madre. Tu hijo vendrá de algún modo. ¿Lo olvidas? Un hijo no solo viene del vientre. Tú y yo… eres la mayor alegría que tengo en la vida, un regalo que Dios me dio. Eres mi hija”, le respondió ella, recordándole que no comparten genes.
“Pero nunca podré tener un hijo mío con Danilo. Nunca podré ver mi reflejo en la carita de un hijo“, lamentó la maestra.
Raúl y Lidia enfrentan la muerte de su hijo
Por otro lado, Raúl y Lidia tuvieron que vivir el dolor más grande de sus vidas, pues Binicio recibió un impacto de bala en el pecho, lo que terminó quitándole la vida en el hospital.
El joven activista quiso detener las operaciones de la PWA junto a sus compañeros ambientalistas, pero las cosas salieron mal.
Álvaro mandó a Belizario y sus hombres a usar toda la fuerza que fuera necesaria para reprimir a los manifestantes, y el policía corrupto no dudó en dispararle a quemarropa al joven, sin saber quién era su padre.
“No puedo imaginar la vida sin ti. Todo lo que hice, la persona que soy, fue por ser tu padre. No me dejes solo, hijo”, le rogó el empresario a su retoño.
En sus últimos minutos de vida, Binicio quiso saber cómo estaban Amanda y los demás activistas, y pedirle a su padre que no siguiera aportando en la destrucción del medioambiente y la creación de zonas de sacrificio.
“Prométeme algo, papá. Estoy orgulloso de ser tu hijo. No necesitas el dinero de la PWA”, le dijo a Raúl.
“Quiero que tengas cuidado con Álvaro, de verdad… Puede hacerte daño, puede hacerle daño a todo el mundo… Te amo tanto, pá”, fueron sus últimas palabras antes de morir.
