Este fin de semana causó conmoción una fuerte pelea dentro de Gran Hermano entre Pincoya y Cony, por la que esta última pidió la expulsión de su compañera o ella misma renunciaría.
Según se vio en las imágenes del tenso momento, durante la fiesta del viernes, Capelli gritó que Jennifer la habría empujado y salió del lugar muy alterada.
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Luego, en el confesionario, la bailarina comentó que “pasó algo indiscutible en la fiesta, esta mujer me empuja, así que quiero saber qué va a pasar, o se va ella o me voy yo, no me importa nada“.
Como suele pasar después de situaciones de pelea dentro de la casa, durante el sábado y domingo se mostraron muy pocas imágenes de los jugadores, por lo que los televidentes no se pudieron enterar qué había pasado con ambas.
Sin embargo, este domingo, durante la noche de eliminación, por fin se dio a conocer cuál fue la resolución de este conflicto, tanto por parte de la producción como de las mismas involucradas.
Finalmente, durante el programa se mostró que, luego de que Constanza dijera en el confesionario que se quería ir, el Gran Hermano le dio su decisión.
“Necesito revisar las imágenes. Voy a hablar con Jennifer y hablaré con ella también. Voy a hacer lo siguiente. No quiero que tú estés mal, por lo que acepto tu salida“.
Más tarde, Scarlette e Ignacia convencieron a Constanza de quedarse, y finalmente las tres gritaron: “No nos vamos ni cagando”.
La decisión final de Gran Hermano
Durante el programa, en vivo y en directo, Diana y Julio César informaron cuál fue la decisión de Gran Hermano sobre la expulsión de Jennifer que pidió Constanza.
La bailarina tuvo que ir al zoom, lugar donde se realizan las fiestas, para conocer qué pasaría con su compañera tras la denuncia.
“El conflicto partió por algo muy pequeño, que yo me empecé a sentir mal, a tener mucha ansiedad, mucha angustia y por eso le dije a Pincoya que me sentía de mal humor”, explicó.
Agregó que “después me sentí más tranquila para ir a la fiesta y vi varias cosas que me dolieron, sentí el aislamiento y distancia de Pincoya y Francisco cuando los necesitaba más que nunca”.
“El mismo día renuncié dos veces y sentí que estaba en un momento de mucha angustia. Vi a Pincoya recomponiendo las cosas con Francisca y Sebastián y me dolió mucho, que tenga esa energía con gente que ha hecho mucho daño”, contó.
Además, expuso que, si bien al inicio se sintió físicamente agredida, luego, cuando ya estaba tranquila, le dijo a Gran Hermano que realmente no había sido así.
Finalmente, abrieron el sobre rojo, y Julio César lo leyó: “Gran Hermano ha tomado la determinación de que no hubo agresión, por lo tanto, Jennifer continúa en la casa“.
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