La noche del domingo, por votación del público, Lucas Crespo fue eliminado por segunda vez de Gran Hermano. Ahora, de regreso nuevamente en Chile, entregó sus primeras declaraciones.

“Esta vez me duele más que la primera, voy a decir. La primera estaba como chato, me quería ir, y ahora me quería puro quedar, la verdad”, expresó entre risas.

En esa línea, explicó que “tal vez la energía con la que yo estaba, hacía un poquito de falta en la casa”.

Por otro lado, aseguró que este nuevo paso por la casa fue “bacán”, y que así también debería haber sido el primero. “Me llevo la mejor de las experiencias. Ahora sí me voy con cariño a Gran Hermano“, destacó.

De hecho, parte de este “cambio de switch” fue porque iba con la cabeza más clara, con la certeza de que podía pasar hambre y de que el programa incluye actividades en las que, idealmente, se debe tener buena disposición.

Lucas recordó su pelea y reencuentro con Pincoya en Gran Hermano

En un momento, le preguntaron cómo había sido el reencuentro con Pincoya, después de protagonizar una de las peleas más fuertes del reality.

“Bacán. Igual, apenas salí la primera vez, fue como ‘las estupideces por las que uno peleaba’. Ya desde ese momento ella estaba absolutamente ni ahí con el conflicto”, respondió el joven deportista e influencer.

Según él, “fue emocionante que hayamos partido de cero, y fue lindo al final dejar de lado cualquier tipo de rencor y poder llevarnos bien. Ella me recibió con todo el amor y cariño del mundo, entonces fue bacán”.

Por último, Lucas Crespo agradeció a quienes lo apoyaron en este breve reingreso a Gran Hermano. “Yo sé que uno la caga y de repente es difícil bancarme tanto. Uno tiene su carácter y se equivoca, pero nunca es con una mala intención“, cerró.