La noche del jueves, en un nuevo capítulo de Gran Hermano, el panel del programa comentó la estrategia de Sebastián de salvar a Constanza de la placa.

Según Michael Roldán, Sebastián ha tenido “una relación de cero molestia a Cony, ha sido más amigable con Vivi. Probablemente, su negocio ahora es querer la permanencia en la casa. Salvándola está firmando su timbre a semanas de acabar el reality”.

Al igual que su compañero, Nicolás Quesille aseguró que esa decisión era tanto por estrategia como por “cariño genuino”, aunque tuvo un reparo con el romance entre ambos.

“Vamos a analizar un poquito cuál es la lógica de la relación entre Cony y Sebastián. Podríamos decir que están en un periodo de luna de miel, amándose, queriéndose”, comenzó a decir.

Agregó que “aquí hay algo más que una mera atracción. Esta no es la primera vez que están así. Después pasan un periodo donde comienza a generarse una suerte de olla a presión, porque se pelean por cualquier cosa“.

Después, viene un estallido de violencia verbal. Eso, en términos sicológicos, se conoce como el círculo de la violencia, y es algo que pasa en muchas familias y relaciones de violencia, y es algo que es muy difícil de abandonar”, recalcó.

Sin embargo, expresó que “no es raro que volvamos a ver este círculo, pero esto también habla de una cercanía de relación entre ellos, que es bien profunda” dentro de Gran Hermano.