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¿Sabías que Jason Statham casi murió ahogado en Los indestructibles 3? Conoce la impactante historia

Escrito por:   Francisco Quiñones

RPP
¿Sabías que Jason Statham casi murió ahogado en Los indestructibles 3? Conoce la impactante historia

EFE

Durante la grabación de Los indestructibles 3, título original en inglés: The Expendables 3, el actor Jason Statham casi murió ahogado.

Recordemos que la tercera entrega de esta saga, creada por Sylvester Stallone, es conocida por reunir a un elenco de estrellas de acción de diferentes décadas.

Entre ellos se encuentra Jason Statham, Antonio Banderas, Terry Crews, Arnold Schwarzenegger, Mel Gibson, Ronda Rousey, Jet Li y más.

En la película, Barney Ross (Stallone) y su equipo de mercenarios se enfrentan a Conrad Stonebanks (Gibson), un antiguo cofundador del famoso equipo que se ha convertido en un despiadado traficante de armas y enemigo jurado del protagonista.

El villano, quien Ross creía haber matado años atrás, regresa con un plan para acabar con 'Los Mercenarios' de una vez por todas.

La cinta tiene muchas escenas de acción, sin embargo, una de ellas casi le cuesta la vida a Jason Statham. Siendo el actor un exclavadista profesional, fueron estos dotes en el agua que le permitió esquivar la muerte.

El día que Jason Statham casi muere ahogado en las grabaciones de Los indestructibles 3

En unas de las escenas de Los indestructibles 3, Jason Statham estaba filmando una persecución.

En la película, junto a sus compañeros estaba en una misión en Somalia y tenían que huir de sus perseguidores. El camión lo conducía Statham, no obstante, un despiste de producción en el set casi le provoca un accidente mortal bajo el agua.

Esta secuencia no tenía dobles, además, el actor se atrevió a rodarla él solo. El problema fue que los frenos del camión fallaron y cayó al mar, estando él dentro de la cabina y con el cinturón de seguridad.

"Estaba probando un camión de tres toneladas y se le acabaron los frenos", dijo Sylvester Stallone a Mirror. Gracias a su experiencia como buzo y clavadista profesional, pudo aguantar la respiración bajo el agua.

Su compañero Terry Crews recordó esta situación y contó que, tras salir del agua, Jason Statham se cambió de ropa, lo volvieron a maquillar y continuó rodando la escena: "Pensaba que iba a ver morir a una persona, pero él salió solo y sin problemas".

Cabe resaltar que esta situación no le quitaron las ganas de seguir trabajando y grabando.

Por ejemplo, para Megalodón se estuvo preparando en una jaula en mar abierto rodeado de tiburones. De la misma manera, estuvo en una piscina para Mechanic: Resurrection.

Los indestructibles 3 recibió críticas mixtas. Mientras algunos elogiaron las escenas de acción y el elenco estelar, otros cuestionaron la falta de originalidad y la trama predecible.

La película tuvo un rendimiento moderado en la taquilla, recaudando alrededor de 214 millones de dólares a nivel mundial.

Jason Statham fue buzo y clavadista profesional antes de ser actor

Antes de convertirse en actor, Jason Statham tuvo una carrera diversa y multifacética. Fue un buzo de alto nivel y miembro del equipo nacional británico de saltos de trampolín durante más de una década.

Compitió en diversos eventos internacionales, incluidos los Campeonatos Mundiales y los Juegos de la Commonwealth en los años 90. Aunque no llegó a competir en los Juegos Olímpicos, su dedicación y habilidad en el buceo fueron notables.

Antes de alcanzar la fama, también realizó una variedad de trabajos ocasionales, incluyendo vendedor en el mercado negro.

Estas experiencias le dieron una perspectiva única y auténtica que ha podido traducir en sus personajes cinematográficos.

Durante su tiempo como atleta, trabajó como modelo para varias marcas, incluyendo French Connection, Tommy Hilfiger y Levi's. Su físico atlético y su presencia carismática lo hicieron ideal para la industria del modelaje. 

Su carrera en la actuación comenzó cuando el director británico Guy Ritchie lo descubrió mientras trabajaba como modelo. Ritchie lo eligió para un papel en su película Lock, Stock and Two Smoking Barrels (1998), debido a su habilidad para proyectar una actitud ruda y callejera.

Este fue el punto de partida para su trayectoria en el cine.