Julia reveló sensible motivo para entrar a Ganar o Servir: quiere ayudar a su padre con cáncer

La noche del lunes, una actividad en Ganar o Servir dejó en evidencia el complejo drama familiar que atraviesa Julia, y que la impulsó a entrar al reality.

Sergio y Karla reunieron a los participantes y les encargaron escribirle una carta a alguno de sus compañeros a modo de regalo, instancia en la que Gala escogió a la brasileña.

"Es para una persona que quiero mucho, una amiga. Ella es muy fuerte. Siempre se muestra con una sonrisa en la cara, pero sé que está viviendo cosas que no son tan fáciles", comenzó explicando la modelo española.

"Si hay algo que verdaderamente importa en la vida es la familia y yo, querida amiga, te admiro mucho por lo que tú estás haciendo por la tuya. Quiero que sepas que tienes un tesoro por tener a tu padre todavía", añadió.

Las palabras de Caldirola emocionaron hasta las lágrimas a su compañera, quien dio detalles de lo que está viviendo.

La emoción de Julia: su padre tiene cáncer y quiere ayudarlo con su estadía en Ganar o Servir

"Yo a Gala la quiero. Es tan fácil compartir con ella, y es un aporte", comenzó agradeciendo la brasileña.

En ese contexto, explicó que ella fue criada por su tío, quien vive con su mamá, y por lo mismo tomó el lugar de un padre para ella.

"Él me enseñó a andar en bicicleta, me enseñó todo y me dio todo el amor del mundo. Tiene un cáncer en la cabeza. Yo estoy acá por él", reveló con voz quebrada.

"Quiero darle toda la comodidad del mundo y quiero que se vaya en la casa, que se despida de su familia", añadió, detallando que los médicos le dieron un año de vida, pero ya ha sobrevivido cuatro.

Terminada la actividad, Julia se puso a llorar en el patio junto a sus compañeros de Ganar o Servir, emocionada por extrañar a su "padre". 

Mientras era consolada, Facundo le contó sobre su propio progenitor. "Mi papá en tres meses se fue. Es un dolor asquerosamente horrible, yo estaba en otro país y no pude ni despedirme", le narró el argentino.

Acto seguido, Sabélo se emocionó con la historia, y se puso a llorar pensando en su propio padre, también fallecido.