Íñigo contó en Gran Hermano insólita actitud que tuvo con su nana: “La dejé todo el día encerrada”

Íñigo López sorprendió a algunos compañeros de encierro en Gran Hermano al contar una pasada anécdota de su niñez.

Mientras conversaba con Felipe Thopmson, Camila Power y Linda Marcovich, reveló que cuando era niño había hecho algo malo.

En concreto, el jugador contó en el espacio que cuando tenía siete años encerró, a quien en ese entonces era su nana, en su pieza.

"Yo cuando chico igual era guatoncito. Teníamos una nana, una peruana, y yo quería papas fritas. Un día llegué a las 12 del día y estaba ella para recibirme, era como una cuidadora porque mis papás salían", partió señalando.

A renglón seguido, precisó que "yo tenía siete años. Ella tenía su pieza donde tenía todas sus cosas y la dejé todo el día encerrada ahí porque no me hizo papas fritas".

Sus compañeros lo miraban sorprendidos, pero eso no fue todo, ya que no fue él quien le abrió la puerta.

“Me fui a mi pieza, me puse a jugar Lego, se fue el sol, llegó mi mamá y me pregunta por ella, ‘no sé’, le digo. Va a la pieza y tenía la maleta hecha", expresó.

Gran Hermano: Íñigo López y respuesta de sus padres

En la misma conversación, el polémico participante reveló que sus padres estuvieron muy molestos por lo ocurrido y como una forma de darle una lección, le dijeron una mentira: que lo enviarían a un internado.

"Me hicieron un bolso", precisó, revelando que afortunadamente todo era una broma de sus padres.