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Lollapalooza
Justin Timberlake sorprendió al público de Lollapalooza con un espectáculo enérgico y emotivo, interactuando de cerca con sus fanáticos e incluso cumpliendo el sueño de una niña de 10 años al darle un autógrafo. Con más de 10 músicos y bailarines en escena, el cantante hizo vibrar a todos con éxitos como Can't Stop the Feeling y Selfish, demostrando que a sus 44 años sigue teniendo mucho que ofrecer en el mundo del espectáculo.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesLos años no pasan por Justin Timberlake, quien hizo bailar al público de Lollapalooza en el cierre de la segunda jornada.
"Santiago, ¿you ready? (¿están listos?)", fue lo primero que esbozó el artista estadounidense, que comenzó su espectáculo con Mirrors, encendiendo de inmediato al escenario.
Con más de 10 músicos y bailarines, Justin Timberlake se adueñó del escenario Cenco Mall, interactuando en reiteradas oportunidades con sus fanáticos.
El cantante invitó en varias oportunidades al público a interpretar junto con él sus éxitos, dándose incluso una pausa en el show para poder acercarse un poco más.
A propósito de la conexión con sus fanáticos, el artista se fijó en una pequeña que estaba sobre los hombros de su padre en las primeras filas.
Allí, Justin Timberlake no solo la saludó, sino que también le preguntó su nombre (Camila) y su edad (10 años), generándose un tierno momento entre ambos, el cual culminó con la niña pidiéndole un autógrafo.
Acto seguido, el cantante pidió que le acercaran el papel y un lápiz, cumpliendo el sueño de la menor de edad, quien lo miró asombrada y solo pudo decir: "Gracias", frente a él.
Posteriormente, Justin Timberlake siguió entregando un gran espectáculo, interpretando éxitos como Can't Stop the feeling y Selfish.
Tal fue el cariño que recibió del público, que el cantante en un momento no pudo contener la emoción y se quebró ante la multitud, quienes comenzaron a aplaudirlo.
Tras su paso por el Lollapalooza, Justin Timberlake sigue demostrando que, a sus 44 años, tiene show para rato.