Mónica fue la última eliminada del reality Gran Hermano, y como es habitual, su partida no estuvo exenta de polémicas.

Todo ocurrió cuando la participante más longeva en estar en un reality tuvo que dar a conocer su voto legado, entregándoselo a Ignacia Michelson.

“Tuve muy poco tiempo de conocer a esta persona, no tengo nada personal contra ella. Mi voto legado es para Ignacia Michelson”, anunció.

Sin embargo, la decisión de Mónica -al parecer- no fue del agrado de la modelo, quien respondió a la nominación.

“Ya lo sabía, y la verdad me vale lo que me deberían estar metiendo. No me importa, la verdad, para ser sincera”, dijo la influencer.

Asimismo, mencionó que “en México, decir eso es como simpático, tal vez acá lo tomen mal, pero me vale nada”.

Respuesta de Mónica a Nacha Michelson

En conversación con Página 7, Mónica mostró su disgusto por la respuesta de Nacha, asegurando que era una falta de respeto.

Consultada por quién debería ser la próxima eliminada, sostuvo que “ustedes saben por quién voté, por esta niña que recién la vengo conociendo hace dos semanas y no me gustó lo que respondió”.

En esa misma línea, recalcó que “todavía no me gustó, porque yo no merezco una falta de respeto, ni siquiera en televisión”.

Respecto a los otros dos nuevos participantes, Fede y Scarlette, Mónica contó que con esta última “me sentí muy bien cuando ella un día me vio tejiendo. Ella se acercó a mí y me contó que también hacía tejido”.

“Le dije que lamentablemente, a mí no me habían dejado entrar con lana, con mis hilos. Pero tuve de alumnos a Hans aprendiendo a tejer y a esta niña, a la Estefanía también. También quiso aprender.

Finalmente, sostuvo que estuvo feliz por su participación, “si hubiera tenido más hilos les habría enseñado muchas cosas a las chicas”, cerró.