El pasado fin de semana, Mónica abandonó el encierro de Gran Hermano, asegurando que ya era su momento para salir, pues estaba cansada de algunas situaciones dentro de la casa. Ya de regreso a la realidad, la mujer de 77 años conversó con Página 7, entre otras cosas, sobre la cercana relación con Cony en el encierro.
Si bien Mónica entregaba contención emocional a varios de los participantes, y tenía un especial vínculo con Hans, cuando Constanza la buscaba para conversar, ella siempre insistía en que la entendía “mejor que nadie”, y que ella sabía por qué.
Por lo mismo, quisimos saber a qué se refería con esas palabras. “Problemas que tuvo con su mamita, con su mamá. Yo no te voy a decir qué es lo que pasó, pero yo la entendí porque tengo un familiar parecido, con problemas como la Coni“, respondió.
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“Entonces yo le dije que nadie, pero nadie, ni siquiera Pincoya o Sebastián o qué sé yo, la iban a entender como la entendía yo. Y me daba mucha pena“, explicó también.
Mónica analizó los fuertes conflictos de Cony dentro de Gran Hermano
Por otro lado, Mónica relacionó estos problemas en la historia de vida de Cony, con el hecho de que el encierro la esté afectando de manera negativa, llevándola a protagonizar varios conflictos al interior de Gran Hermano.
“Esto la afecta, sí, pues le han hecho recordar sus problemas, que son, de todas maneras, sin comentarios de parte mía. Solamente yo sé”, destacó en la entrevista.
En esa línea, explicó que era incapaz de desligarse de la joven bailarina y no empatizar con sus sentimientos, pese a lo mal que la veía algunas veces.
“Yo la acogía porque ella me buscaba, entonces, ¿cómo no darle apoyo? ¿Cómo no quererla? ¿Cómo no comprenderla? Porque uno nunca está libre de nada. Aunque esté de edad, nunca está libre de nada”, cerró.
