La historia de amor del conductor de 'Siempre hay un chileno' que lo llevó a vivir en Barcelona

Al igual que los protagonistas de Siempre hay un chileno, Marcelo Kiwi también está haciendo patria en otro país, motivado por su espíritu viajero y el amor.

“Terminando la temporada 1, me transformé en los personajes que voy a grabar, porque me enamoré de una chilena que vivía en Alemania”, contó el conductor del programa de Canal 13, en conversación con Página 7.

Fue así como el conductor de Siempre hay un chileno se fue a vivir un año al país europeo.

“A ella después le salió un trabajo en Barcelona, y nos fuimos juntos a España”, añadió Kiwi.

En ese contexto, destacó que dicha ciudad es perfecta para moverse a los diferentes países.

“Me queda muy cómodo. Nosotros somos un programa muy low cost. Desde Barcelona son menos horas de viaje, los pasajes son más baratos, etc.”, explicó.

Aun así, admitió que no pasa mucho tiempo en España, “porque estoy viajando casi seis meses al año, mostrando las historias de los chilenos”.

Considerando ese ritmo de vida, Kiwi reconoció que es complejo mantener su relación amorosa.

“Llegamos a un acuerdo. Yo no me puedo ir de la casa más de 18 días. Después tengo que estar de vuelta y pasar unas dos semanas en la casa”, detalló.

“Muchas veces mi pareja también me acompaña, pide permiso en el trabajo. Ella es periodista, trabajó mucho tiempo en Canal 13, y me ayuda con la preproducción y coordinación de Siempre hay un chileno”.

De igual forma, Kiwi destacó que su pareja ha sido un gran apoyo en la realización del programa.

“En redes sociales es conocida como ‘La jefa’. Podría convertirse en una influencer”, comentó.

“Me gustaría que pudiera venir a todos los capítulos, pero por trabajo no puede”, concluyó.